Redacción Deportes (EE.UU.), 5 may (EFE).- Un triple de Aaron Gordon a falta de 2.8 segundos le dio este lunes una victoria a los Denver Nuggets, que sorprendieron a los Oklahoma City Thunder por 119-121 para tomar ventaja por 0-1 en las semifinales del Oeste.
Por ahora se han jugado tres cruces de semifinales de conferencia y todos ellos han acabado con victoria visitante: los Indiana Pacers frente a los Cleveland Cavaliers, los New York Knicks ante los Boston Celtics y los Nuggets contra los Thunder.
Gordon, quien ya fue el héroe con un mate sobre la bocina en el cuarto duelo contra Los Angeles Clippers, volvió a rescatar a los Nuggets con un triplazo que dejó en ‘shock’ a unos Thunder que iban ganando de 11 puntos a falta de 4.31.
El Paycom Center de Oklahoma City acogerá también el segundo partido de la serie este miércoles.
Aunque Gordon acaparó al final los titulares, este era el primer asalto del duelo de MVP entre un Shai-Gilgeous Alexander que es el favorito para ganarlo este año y un Nikola Jokic que lo conquistó en tres de los últimos cuatro años.
Jokic firmó un recital deslumbrante con 42 puntos (15 de 29 en tiros), 22 rebotes y 6 asistencias. Solo Wilt Chamberlain (en dos ocasiones), Shaquille O’Neal y Giannis Antetokounmpo habían conseguido 40 o más puntos, 20 o más rebotes y 5 o más asistencias en el ‘playoff’.
Por su parte, Shai encabezó a los locales con 33 puntos (12 de 26), 10 rebotes y 8 asistencias.
En los Thunder, primeros del Oeste con el mejor balance de la liga, también destacó Alex Caruso con 20 puntos, 6 asistencias y 5 robos. Todo su quinteto titular acabó en dobles dígitos de anotación pero perdieron claramente la lucha por el rebote (43 por 63).
En Denver (cuartos del Oeste), Gordon sumó 22 puntos y 14 rebotes y Jamal Murray aportó 21 puntos, 6 rebotes y 6 asistencias. Los Nuggets se anotaron el triunfo pese a sus 18 pérdidas (9 de los Thunder).
Oklahoma y Denver llegan a este serie por caminos muy diferentes, ya que los Thunder barrieron a los Memphis Grizzlies (octavos) por 4-0 mientras que los Nuggets tuvieron que pelear y sudar una espinosa serie a siete partidos para eliminar por 4-3 a los Clippers (quintos).
Una nueva genialidad de Gordon

Los Nuggets, pese a tener solo 48 horas entre el último partido en casa con los Clippers y el primero con los Thunder a domicilio, ofrecieron una prometedora presentación con un +8 en el primer periodo (16-24 a falta de 4.20).
Pero estos Thunder resultan especialmente temibles tanto por su ataque como por su defensa.
Desde atrás crecieron los de Mark Daigneault para darle la vuelta al marcador, alcanzar un +14 en el segundo cuarto y llegar al intermedio dominando por 60-50.
Oklahoma no estuvo fino desde el perímetro en la primera mitad (7 de 24) pero limitó a Denver a un 39,6 % en tiros de campo, un 2 de 15 en triples (13,3 %) y además forzó 9 pérdidas de los Nuggets.
Jokic, que volvió a dejar un tiempo muerto muy intenso y exigiendo el máximo a sus compañeros, tiró del carro visitante con 16 puntos y 12 rebotes, pero sus minutos en el banquillo fueron una vez más un lastre para los de David Adelman.
Shai fue el mejor de los locales con 15 puntos, 8 rebotes y 5 asistencias.
Los Thunder empezaron la segunda mitad con un robo de Caruso en los primeros segundos y amenazaron con romper el encuentro desde su defensa (82-68 con 4.36 por jugarse).
Pero los Nuggets no tiraron la toalla. Jokic encontró un socio perfecto en Russell Westbrook (10 puntos) y Denver cerró ese tercer periodo con un parcial de 8-19 para aterrizar en el desenlace con sus opciones intactas (90-85).
Poco más de dos minutos se fue Jokic a descansar y cuando volvió a pista su equipo ya perdía de 10.
Muy meritorios a pesar de saberse inferiores, los Nuggets se mantuvieron en la órbita de los 10 puntos y dispuestos a dar un puñetazo de última hora.
A solo 4 puntos se situaron con 1.44 en el reloj tras una canasta de un Jokic indomable. Shai falló a continuación y a los Nuggets se les abría la puerta de la remontada, que un triple del serbio colocó a solo un punto.
La recta final se iba a decidir en una batalla de tiros libres y Chet Holmgren falló dos seguidos con 9.5 segundos por jugarse, lo que permitió que Denver tuviera una última oportunidad para sellar la remontada -no iba por delante en el marcador desde el primer cuarto- y Gordon no la desaprovechó con una nueva genialidad.
