Al menos 17 heridos y turistas afectados dejan protestas en la vía del tren a Machu Picchu

Fotografía de archivo de la ciudadela prehispánica de Machu Picchu (Perú). EFE/ Paula Bayarte

Lima, 16 sep (EFE).- Al menos 17 heridos y alrededor de 1.500 turistas afectados dejan las protestas que mantienen bloqueada la vía ferroviaria por donde transitan los trenes que llegan a Machu Picchu, informó este martes Werner Salcedo, gobernador regional de Cusco, departamento del sur de Perú en donde se encuentra la ciudadela inca.

“Hemos solicitado hace dos o tres semanas la instalación de una mesa porque se veía venir este problema, y hoy ya recién, que tenemos 17 heridos, se establece”, expresó a medios locales Salcedo, que confirmó que finalmente se reunirá con el alcalde provincial y todos los alcaldes distritales, en una mesa de diálogo este martes a las 15:00 hora local (22:00 GMT).

La reunión, confirmó al medio RPP, se dará en la sede del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (MIncetur), para tratar no solo la situación de las empresas de autobuses, también la venta de boletos y la gestión completa del santuario que arrastra desde hace días una situación social convulsa en torno al santuario.

La paralización del servicio ferroviario entre las poblaciones de Ollantaytambo y Machu Picchu Pueblo, que es la principal forma de llegada de la mayoría de turistas que visitan Machu Picchu, ha hecho que más de 1.300 turistas nacionales y extranjeros fueran evacuados a Ollantaytambo, y otros 200 permanezcan a la espera, a menos que se camine varias horas por los raíles hasta la zona más cercana donde pueden entrar vehículos.

Además, el jefe de la Región Policial de Cusco, Julio César Becerra Cámara, informó que la vía ferroviaria se había visto afectadas, presentando una «extraña excavación bajo los rieles», por lo que el servicio de trenes para evacuar este último grupo se veía, por el momento, impedido.

Bloqueos, evacuaciones y heridos

La vía fue escenario en la noche del lunes de un enfrentamiento entre la Policía Nacional y manifestantes que dejó en ese momento al menos diez heridos, según reportó la agencia oficial Andina, después de que los agentes trataran de liberar las vías para evacuar a los turistas que se encontraban atrapados debido al parón.

La empresa de Ferrocarril Trasandino S.A., concesionario de la vía férrea, autorizó el traslado de los visitantes de manera excepcional para movilizar a los pasajeros atrapados en Machu Picchu Pueblo, conocido popularmente como Aguas Calientes, hasta Ollantaytambo, pese a que este servicio había sido cesado temporalmente.

Sin embargo, esta maniobra fue interrumpida por grupos de manifestantes que solicitan la llegada de los nuevos autobuses que deben realizar el transporte de turistas desde Machu Picchu Pueblo hasta la zona arqueológica de la ciudadela inca.

Las unidades pertenecientes a la empresa Inversiones Sumaq Ayllu San Antonio de Torontoy debían haber iniciado su servicio desde el 5 de septiembre, cuando venció la concesión que tenían los autobuses de la compañía Consettur, que ha operado este servicio desde hace 30 años.

Sin embargo, el transporte de los autobuses quedó suspendido el lunes después de que los vagones que debían transportarlos sufrieron presuntamente un sabotaje con el corte de cables como los frenos y otros implementos.

En su demanda, los participantes de la protesta exigen además el retiro de los autobuses, Consettur, y que continúan operando a falta de que Perú Rail, encargada del transporte de autobuses de una zona a otra, traiga la nueva flota.

Estas protestas suceden además el supuesto ataque deliberado en las unidades de Perú Rail que estaban destinadas a trasladar esta nueva flota de autobuses.