Madrid, 5 may (EFE).- El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ha cargado contra el PP acusándole de ser un partido “antimarroquí” e ir camino de convertirse en “antifrancés” por boicotear el Acuerdo de Amistad con Francia, además de reprocharle que no hayan dedicado ni una sola palabra al sufrimiento en Gaza.
Ha sido durante su comparecencia en el Congreso en la Comisión de Asuntos Exteriores para explicar el Plan de Acción Exterior 2025-2028, que aprobó el Gobierno el pasado 1 de abril, y también a petición de varios grupos políticos.
Albares ha reprochado también al PP y a Vox que se estén alineando con la extrema derecha en Europa “esparciendo muchos bulos” y que en lugar de apoyar la utilización de las lenguas cooficiales en Europa, uno de los ejes de las intervenciones de los partidos independentistas, se dediquen a mandar “cartas incendiarias” a las instituciones de la UE.
“Les pido responsabilidad, no es tiempo de regate corto”, ha advertido el ministro.
Marruecos y el Sahara ha sido una de las cuestiones que han traído a colación casi todos los partidos que han tomado la palabra, como el PP, cuyo portavoz en la comisión, Carlos Floriano, ha tildado de “pésima decisión” haber “abandonado al pueblo saharaui” y ha acusado al Ejecutivo de “confirmar la soberanía del invasor sobre el ocupado”.
El PP ha vuelto a la carga con Venezuela al señalar que lo único que ha hecho el Gobierno ha sido trabajar para sacar del país al ganador de las elecciones (Edmundo González).
Desde Vox, Carlos Flores ha señalado que el plan de Acción Exterior contiene “sesgos ideológicos inaceptables” y ha cargado contra una propuesta que, según ha dicho, no hace ni una sola referencia al Sáhara, a Israel o a Guinea Ecuatorial, único país de África en el que se habla castellano.
Y ante las críticas de la izquierda por el aumento del gasto militar, incluidos de sus socios de Sumar, Albares ha defendido que lo que está en juego es si nos regimos por el orden multilateral o “por la ley de la jungla”, subrayando que el debate no está en producir más armas ni mucho menos adquirirlas ni comprárselas a EEUU.
Ha argumentado en este sentido que ocho de cada diez euros se van a quedar en España y nueve de cada diez en Europa.
Agustín Santos, de Sumar, ha asegurado que la UE necesita una seguridad y defensa autónoma bajo un “mando común” que pueda coordinarse con Naciones Unidas, algo que a su juicio “no será posible en el marco de la OTAN”.
Entre los partidos independentistas, Francesc Álvaro, de ERC, se ha centrado sobre todo en que hay que “repensar” el paraguas de la OTAN ante el cambio de orden mundial que está propiciando el Estados Unidos de Donald Trump y en urgir a que Europa, a la que ve “errática”, se focalice en su liderazgo y en sus valores y que avance en su integración.
EH Bildu ha insistido en que falta un análisis riguroso de por qué España y Europa deben armarse advirtiendo de contradicciones en las que se están cayendo como reforzar la OTAN cuando EEUU, en este momento, está generando inestabilidad en el mundo, como ha puesto de relieve Jon Iñarritu, quien también ha pedido a Albares que rectifiquen su apoyo a la propuesta autonomista de Marruecos para el Sahara.
Mientras tanto, la diputada de Junts Marta Madrenas ha optado por poner el foco en la situación de los 400.000 catalanes que viven en el exterior y de los que solo 24.000 pudieron votar en las últimas elecciones al Parlament, y en llamar la atención sobre el “acercamiento” de España al “régimen chino”.
Otro de los asuntos que ha salido en el debate lo ha traído el portavoz de Podemos, Javier Sánchez, al pedir al ministro que aclare si España va a rescindir los 46 contratos firmados con empresas de armamento israelíes por valor de 1.044 millones de euros suscritos con posterioridad al 7 de octubre de 2023 cuando Israel inició la guerra en Gaza en respuesta a los ataques terroristas de Hamas.
Una pregunta que ha quedado sin responder por parte del ministro.