Bruselas, 14 jul (EFE).- El ministro de Asuntos Exteriores español, José Manuel Albares, dijo este lunes que España apoyará «cualquier alto el fuego que sea incondicional» en Ucrania, pero consideró que los ataques de Moscú desde hace semanas sobre el país no permiten ser optimista sobre esta posibilidad.
El titular de Exteriores se pronunció así sobre el anuncio del presidente estadounidense, Donald Trump, de que impondrá «aranceles secundarios de alrededor del 100 %» a Rusia si no se alcanza un acuerdo de paz en los próximos 50 días.
«Nosotros vamos a apoyar cualquier posibilidad de alto el fuego real en Ucrania, cualquier alto el fuego que sea incondicional y, sobre todo, que sea un primer paso hacia una paz justa y duradera», dijo en declaraciones a su llegada a la reunión en Bruselas de ministros de Exteriores de la UE y de los países de la Vecindad Sur.
«Pero, sinceramente, lo que estamos viendo desde hace a muchas semanas por parte de (el presidente ruso) Vladímir Putin, no me permite ser optimista hacia ese alto al fuego porque lo que vemos es día a día, noche a noche, cientos de drones, cientos de misiles lanzados sobre Ucrania de manera indiscriminada, matando población civil todos los días», añadió.
En este sentido, el ministro de Exteriores español consideró que «Europa tiene que ser muy clara» a la hora de decir que «alto el fuego sí, pero bajo unos principios», que a su juicio deben ser el respeto del derecho internacional y de la soberanía y la integridad territorial de Ucrania.
Y mientras tanto, añadió, la Unión Europea debe seguir apoyando a Kiev «tanto tiempo como sea necesario».
El presidente de Estados Unidos aumentó este lunes la presión sobre su homólogo ruso al amenazar con imponer “aranceles muy severos” si no se alcanza un acuerdo de paz con Ucrania en un plazo de 50 días y al confirmar el envío de nuevo armamento a Kiev.
El aparente cambio de postura del mandatario republicano se escenificó durante una reunión en la Casa Blanca con el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, tras varios días de mostrar una creciente frustración con Putin por su negativa a detener los bombardeos en territorio ucraniano.
Trump, quien asumió el poder en enero prometiendo poner fin a la guerra en un solo día, afirmó que en los últimos meses ha estado cerca de lograr un acuerdo en al menos cuatro ocasiones, aunque ninguno se concretó.
El principal punto de inflexión en la relación de Trump con Putin se produjo el 3 de julio, durante una llamada telefónica en la que el presidente ruso comunicó al estadounidense que no abandonará sus objetivos en Ucrania, tras lo cual Trum ha repetido que está “muy descontento” con el jefe del Kremlin.
“Si yo fuera Vladímir Putin, tras el anuncio de hoy me tomaría más en serio las negociaciones sobre Ucrania”, comentó Rutte.