París, 28 may (EFE).- El español Carlos Alcaraz podía mirar el vaso medio vacío o medio lleno en su jornada de Roland Garros. El defensor del título se dejó un primer set contra un jugador asequible para su nivel, el húngaro Fabian Marozsan, 56 del ránking. Pero vio como en su lado del cuadro caían potenciales rivales de nivel.
Empezando por el noruego Casper Ruud, séptimo favorito, doble finalista en París, cuya trayectoria se cruzaba en cuartos de final, o el griego Stefanos Tsitsipas, finalista hace cuatro años, que asomaba e los octavos.
En primera ronda perdió el estadounidense Taylor Fritz, número 4 del mundo, el contrincante de mejor rango hasta las semifinales, por lo que su camino queda muy despejado.
Alcaraz firmó su vigésimo triunfo en Roland Garros, el primer tenista nacido en este siglo que los logra, a costa de un Marozsan que le tuteó durante el segundo set, pero al que aplastó en los otros tres. El español se deja un girón, pero también mostró un buen nivel de juego, una doble cara que él mismo se encargó de matizar.
“No he tenido una desconexión en el segundo set, es que él ya sido superior en ese momento”, dijo el español, que destacó que cuando lo necesitó fue capaz de elevar el nivel y acabar alzándose con la victoria.
Su rival por un puesto en octavos será el bosnio Damir Dzumhur, un veterano de 33 años que ocupa el puesto 69 del ránking tras haber protagonizado un descenso a los infiernos después de que en 2018 fuera número 23.
El balcánico se mostró muy superior al francés Giovanni Mpteshi Perricard, 7-6(4), 6-3, 4-6 y 6-4, pese a que en el inicio del cuarto set pareció sufrir una lesión que amenazaba con obligarle a retirarse.
Si lo supera, el español se medirá al ganador del duelo entre el británico Ben Shelton, 13 del mundo, que no tiene sobre arcilla sus mejores resultados, y el italiano Matteo Gigante, procedente de la fase previa, verdugo de Tsitsipas.
En el siguiente escalón no estará Ruud, derrotado por el portugués Nuno Borges, el primero de su nacionalidad que accede a la tercera ronda de un Grand Slam, por lo que el rival de más entidad en esa parte del cuadro sería el estadounidense Tommy Paul, duodécimo favorito, que tuvo que emplearse a fondo en cinco sets para remontar al húngaro Marton Fucsovics, que dispuso de un servicio para apuntarse el duelo antes de inclinarse 4-6, 2-6, 6-3, 7-5 y 6-4.
El que sí avanzó fue el italiano Lorenzo Musetti, octavo clasificado, que derrotó al colombiano Daniel Galán, 6-4, 6-0 y 6-4, y que se mediría con Alcaraz en semifianales, en una reedición de la final de Montecarlo que ganó el español.
En el cuadro femenino, sin embargo, no hubo sorpresas. La número 1 del mundo, la bielorrusa Aryna Sabalenka se deshizo de la suiza Jil Teichmann, 97 del mundo, tras un primer set complicado 6-3 y 6-1, y se medirá contra la serbia Olga Danilovic, 34 del mundo, que derrotó a la estadounidense Danielle Collins, 54.
La polaca Iga Swiatek, ganadora de las tres últimas ediciones, volvió a dar muestras de que en París resucita y tras una mala temporada que le ha relegado al puesto 5 del ránking, desplegó de nuevo un gran tenis contra la británica Emma Raducanu, ganadora del Abierto de Estados Unidos de 2021, 6-1 y 6-2.
La finalista de la pasada edición, la italiana Jasmine Paolini, también dio un paso al frente contra la australiana Ljla Tomljanovic, a la que derrotó en dos sets, 6-3, 6-3, tras haber superado la primera manga en tres. Su siguiente rival será la ucranina Yulia Starodubtseva, rescatada de la fase previa, que venció a la rusa Anastasia Potapova, 7-6(4), 6-2.
La china Quinwen Zheng también ha recuperado en Roland Garros la magia que el pasado verano le impulsó en esa misma pista hasta el oro olímpico.
La favorita número 8, semifinalista del pasado torneo de Roma, se deshizo de la colombiana Emiliana Arango, 6-2 y 6-3, y se medirá contra la canadiense Victoria Mboko, de 18 años, procedente de la fase previa, debutante en un Gran Slam, una estrella ascendente del tenis.
Luis Miguel Pascual