Zaragoza, 5 may (EFE).- La ministra de Educación, Pilar Alegría, ha anunciado este lunes que el Consejo de Ministros aprobará en junio el decreto que endurecerá los requisitos para crear nuevas universidades privadas.
En el acto de toma de posesión de la rectora de la Universidad de Zaragoza, Rosa Bolea, la ministra ha proclamado la defensa del Gobierno de la universidad pública y ha asegurado que no se trata de poner “cortapisas” a la universidad privada, sino de que “las nuevas que echen a andar, lo hagan de la mano de un proyecto serio, de calidad”, desde el punto de vista de la formación y de la investigación.
“Es cuestión de modelos, y el que defendemos es un modelo donde haya un sistema mayoritariamente público que esté acompañado de una oferta privada complementaria y equilibrada”.
Según la ministra, “se trata de velar por que los ciudadanos reciban un sistema de educación superior de calidad”. “Ese es el espíritu del decreto” que, una vez ha pasado el periodo de alegaciones, se presentará a la comunidad universitaria y aprobará el Consejo de Ministros el próximo mes de junio, ha avanzado.
Además, en su intervención ha reivindicado el importante papel de las universidades en la construcción del modelo de sociedad y el “estupor” que generan las noticias que llegan desde “los países más poderosos del mundo”, en alusión a Estados Unidos bajo el mandato de Donald Trump, donde se señala a las universidades más prestigiosas del mundo, a las que “se está hostigando y atacando”.
Alegría ha advertido de que no es un simple hecho anecdótico, sino que responde a una ideología que recorre bastantes países y que tiene como elemento común “poner en cuestión -ha aseverado- los valores con los que henos construido las principales sociedades más avanzadas en los últimos años de la historia”.
Algo que Europa sabe bien, ha proseguido, porque los sistemas de bienestar y modelos de sociedad y economía se han cimentado gracias al conocimiento que han trasladado sus más de 5.000 centros de formación superior.
Por ello, ha insistido en la importancia de que tengan un papel protagonista en estos momentos de cambio geopolítico, para preservar valores europeos como la justicia social y la equidad.