Alfonso Reyes, sobre la Liga U sub-22: «Ojalá vaya bien, pero creo que no es el camino»

Fotografía de Mariscal, en la que puede verse en una imagen de archivo del 25 de junio de 2021 al exjugador de baloncesto Alfonso Reyes, presidente de la Asociación de Baloncestistas Profesionales (ABP). EFE

Madrid, 9 ago (EFE).- Alfonso Reyes (Córdoba, 1971), presidente de la Asociación de Baloncestistas Profesionales (ABP), afirma que la creación de la nueva competición para jugadores sub-22 en España, la Liga U, «no es el camino» y «llega tarde» en su objetivo de frenar el éxodo de jóvenes nacionales hacia Estados Unidos.

Fotografía de Rodrigo Jimenez, en la que puede verse en una imagen de archivo del 13 de febrero de 2018 al exjugador de baloncesto Alfonso Reyes, presidente de la Asociación de Baloncestistas Profesionales (ABP). EFE

No obstante, el exjugador de equipos como Estudiantes -con el que ganó dos Copas del Rey (1992 y 2000) y fue MVP del torneo en la segunda-, Baloncesto Málaga o Real Madrid, entre otros, expresa su deseo de que pueda ir «bien» en su inicio y desarrollo.

Fotografía de Gustavo Cuevas, en la que puede verse en una imagen de archivo de 2001 al entonces jugador del Estudiantes Alfonso Reyes, hoy presidente de la Asociación de Baloncestistas Profesionales (ABP). EFE

Según relata durante una entrevista con la Agencia EFE, Reyes lamenta que esta iniciativa no haya contado con la participación de la ABP, además de otros organismos, en su creación, pues cree que podrían haber «aportado bastante», y confiesa que se enteró de su nacimiento unos días antes de hacerse público gracias a Elisa Aguilar, presidenta de la Federación Española de Baloncesto (FEB), con quien mantiene una «magnífica relación».

Como indica, existen fórmulas alternativas como las que proponen otras ligas europeas como la de Grecia, donde la mitad de los jugadores del equipo son nacionales y la otra mitad extranjeros, algo que «les está yendo bastante bien».

Según Reyes, España no ha dejado de «fabricar talento», ya que «no paran de salir buenos jugadores en las canteras», aunque después eso no se transforma en minutos con sus respectivos primeros equipos.

Por ello, asegura que la posible solución creada este verano con la implantación de la Liga U sub-22 para jugadores jóvenes, a la que desea la mejor de las suertes, «llega tarde» y «no es el camino».

«La Liga U llega tarde. Donde tendrían que estar estos jugadores es arriba. En su día, la generación del 80 -con jugadores como Pau Gasol, Juan Carlos Navarro o su hermano, Felipe Reyes-, la mejor que hemos tenido, empezó a jugar con el primer equipo, o en el caso de la mía, también existía un abanico de jugadores más amplio para la selección», remarca el que fuera internacional absoluto entre 1995 y 2003, conquistando dos platas y un bronce europeos.

«Lo que pasa es que falta valentía y falta llegar a un acuerdo entre todos, sentarse todos los actores, no sólo una parte, e intentar llegar a soluciones que, por desgracia, a medida que pasa el tiempo, cada vez son más complicadas», continúa.

Esta novedosa competición sub-22, anunciada en junio pasado, echará a andar en octubre, con partidos los viernes y sábados, y con la participación de equipos jóvenes de los representantes en la Liga Endesa, cuyas plantillas se compondrán de seis jugadores españoles y seis extranjeros.

Un «parche» que, según Reyes, «no ataja el problema desde la raíz»: «En la acb tenemos menos del 25 % de los jugadores españoles. Que haya tan pocos jugadores nacionales… Eso no existe en ninguna otra liga profesional del mundo».

Este proyecto de liga sub-22, ideado por el Consejo Superior de Deportes (CSD), acb y FEB, nace, según sus organizadores, «con el objetivo de facilitar y potenciar la vida académica con la formación deportiva al más alto nivel».

Sin embargo, el caso de la selección española sub-18, recientemente campeona del Europeo en Serbia, incluye dos claros ejemplos: el Mejor Jugador del Torneo, Ian Platteeuw, y el héroe de la final, Guillermo del Pino, autor de la canasta sobre la bocina que dio el título al combinado nacional, abandonarán España.

Ambos emprenderán una nueva aventura en el baloncesto de formación estadounidense, que ha provocado la fuga aún mayor de jóvenes atletas desde la aprobación de los derechos NIL (nombre, imagen y semejanza) para que los deportistas universitarios puedan obtener beneficios económicos por medio de patrocinios o acuerdos comerciales.

«Si fuera mi hijo, ante esa oportunidad de poder estudiar en Estados Unidos, aprender inglés y, encima, tener un buen contrato, pues tampoco lo dudaría. ¿Por qué? Pues porque aquí no se han dado las condiciones necesarias para que pueda suponer una tentación el quedarse. Si hubiéramos trabajado antes, como venimos diciendo hace muchos, muchos años en la ABP sin resultado, pues quizás se le pondría un poquito más difícil a estos chicos decidirse. Ahora ya es muy complicado», reflexiona Reyes.

«Ahora todo el mundo se apunta al carro de la formación, pero nosotros desde ABP llevamos varios años ayudando a los jugadores en su formación mediante becas de estudio. O sea, que consideramos de forma muy importante su futuro después del baloncesto», reitera.

En otro orden, Reyes, que fue reelegido en marzo para estar los próximos cuatro años al frente de la ABP, critica el próximo calendario de la Euroliga, que contará con cuatro partidos más que la pasada campaña: «Es una salvajada para los jugadores, en lo único que va a contribuir es a empeorar sus condiciones físicas. Desde la ABP somos los únicos que nos hemos pronunciado al respecto». EFE

Pedro Martín