Almeida y Vingegaard devuelven la mirada al ciclismo

El portugués Joao Almeida (UAE Team Emirates-XRG) vence en la etapa 13 de la Vuelta Ciclista a España 2025 disputada entre el Cabezón de la Sal, y L'Angliru, de 202,7km de recorrido, este viernes. EFE/Javier Lizón

L’Angliru (Cantabria), 4 sep (EFE).- Joao Almeida, con una descomunal subida a L’Angliru, y Jonas Vingegaard, líder a pesar del etapón de su rival, han devuelto este viernes al ciclismo la mirada hacia la Vuelta a España que en lo últimos días se había centrado en las protestas por la participación del Israel-Premie Tech.

Fue, en ese sentido, fronterizo el inicio del Angliru, donde un par de activistas intentaron interrumpir la carrera exhibiendo una pancarta denunciando lo que está pasando en Gaza.

Alguna bandera palestina se vio más durante la durísima subida final, pero ya en esa vertical y eterna ascensión al coloso asturiano la vista se clavó en la carrera, en un Almeida tan impresionante como la escalada y en un Vingegaard al que todos esperaban pero que al final no apareció para rematar.

Quizás porque no pudo o quizás por respeto a un rival que tiró todo el rato y al que todavía mantiene a cierta distancia en la general. Un total de 46 segundos que no son mucho pero que sí lo suficiente para valer una Roja en Madrid.

Sin españoles a los que entregarse, los aficionados también centraron su atención en la que se presume pelea por el tercer escalón del podio. En la que el británico Tom Pidcock cedió tiempo pero aguantó el puesto y el australiano, brillante tercero en la etapa, recortó pero no remontó. Consecuencia, el del Q36.5 mantiene 42 segundos de diferencia respecto al ahora ya líder del Red Bull-Bora.

Fue espectacular como Almeida, con un ritmo infernal y sostenido, iba eliminando a todos sus rivales menos a Vingegaard. También al suizo Felix Gall y al italiano Giulio Ciccone, candidatos todavía con aspiraciones quinto y octavo a 57 segundos y 2.36 de Pidcock.

Como también mantienen esperanzas los jóvenes Giulio Pellizzari, segunda baza del Red Bull-Bora, y Matthew Riccitello, candidato del polémico Israel, sexto y séptimo a 1.43 y 2.15 del británico.

El noruego Torstein Traeen, exlíder de la carrera, y el carismático Sepp Kuus, lugarteniente de Vingegaard, cierran el Top 10 y el grupo de corredores con algunas opciones de podio. Algo con lo que ya no sueñan ni Matteo Jorgenson ni Egan Bernal, undécimo y duodécimo a 7.04 y 8.01 del líder.

Ni ninguno de los españoles. Entre los que los mejores, con Juan Ayuso y Mikel Landa fuera de la pelea por diferentes razones, son los Caja Rural Abel Balderstone y Juanma Guareño, centrados en acabar en el Top 20 que para ciclistas de su carrera sería un regalo.

Como un regalo sería para la Vuelta que Almeida no cediera en su ambición ni Vingegaard en su solidez. Entre ambos apartaron un rato la mirada de la carrera hacia lo deportivo y dejaron de lado durante un rato lo social.

Una protesta por Palestina que, no obstante, avisa con no ceder en los próximos días, aunque incluso quienes participan en ella disfrutaron una hora con lo que deparó el ciclismo. El espectáculo de la Vuelta es para todos.