Madrid, 20 jun (EFE).- El eurodiputado Luis Pérez Fernández, Alvise, ha dicho este viernes al juez que actuó desde «la crítica política» y amparado por su «libertad de expresión» cuando difundió los mensajes que dirigió en la red Telegram contra la fiscal de delitos de odio de Valencia, Susana Gisbert.
Alvise ha comparecido unos 25 minutos ante el magistrado del Tribunal Supremo Juan Ramón Berdugo que le citó para que declarase voluntariamente en la causa abierta ante el Supremo por un presunto delito de acoso, también conocido como ‘stalking’, contra la fiscal, al difundir su foto y criticar su labor en un espacio que entonces tenía más de 40.000 seguidores.
Se trata de la segunda vez que Alvise comparece en el Supremo donde tiene otras dos causas abiertas: una por presuntos delitos de falsedad e injurias por difundir una PCR falsa del exministro y presidente de la Generalitat catalana, Salvador Illa en 2021; y otra por la presunta entrega de 100.000 euros por parte de un empresario para su formación política en las pasadas elecciones europeas.
En declaraciones a los medios a su salida del alto tribunal, Alvise ha explicado que «lo único que pretendía era hacer crítica política», ya que se trata de «personas que quieren meter en prisión a ciudadanos que critiquen la inmigración masiva y legal», por tanto, ha enmarcado sus mensajes en «la libertad de expresión».
El alto tribunal asumió la causa que arrancó el Juzgado de Instrucción número 5 de Valencia, tras la denuncia interpuesta por la fiscal Gisbert contra Alvise por un presunto delito de injurias a funcionario público, coacciones y/u odio a través de redes sociales.
En concreto, Alvise tildó a los fiscales de delitos de odio de responsables de una persecución ideológica, les acusó de multar e intentar encarcelar a quienes hablan de «invasión» migratoria, instó a buscar sus identidades y publicó la imagen de Susana Gisbert, acusándola de pedir prisión y multas por mensajes sobre migración.
Esta publicación suscitó reacciones de 1.500 seguidores que expresaron insultos o la voluntad de perseguir o atacar a la fiscal y divulgaron perfiles suyos en varias redes o el perfil de su hija.
Alvise publicó un segundo mensaje con otra imagen de la fiscal junto a una periodista y sostuvo: «ahora las perseguidas son ellas».
El eurodiputado, además, ha asegurado que volverá al alto tribunal «para la financiación ilegal», dejando claro que «es público y notorio» que recibió esos 100.000 euros.