Antonio Orozco:”No puedo volver a estar 200 días en carretera intentando huir de mi mundo”

Antonio Orozco charla con EFE de 'El tiempo no es oro', del que ha dicho que es "el mejor disco" de su vida y que llega este viernes al público después de un proceso de cambio físico y terapia mental para el artista catalán, con la que ha logrado enfrentarse a algunos de sus monstruos personales. EFE/ Zipi

Madrid, 24 abr (EFE).- En un momento crítico para Antonio Orozco, con 30 kilos de más y la amenaza para su salud que suponía su ritmo de vida, decidió pedir ayuda profesional y asumir que, tras 10 años ininterrumpidos de trabajo huyendo de los problemas, debía parar para poder vivir en mayúsculas, una enseñanza que modela su último disco.

“Soy mucho más feliz porque soy mucho más consciente de las cosas. Cuando vas todo el rato a toda hostia, pierdes esa consciencia y pasan cosas como que engordas indiscriminadamente sin darte cuenta porque no duermes, porque estás todo el día viajando, porque malvives, porque mal bebes, porque malcomes”, se sincera en una entrevista con EFE.

El tiempo y la necesaria reconexión con uno mismo han sido claves en su recuperación, de ahí el título del álbum que publica este viernes próximo, ‘El tiempo no es oro’ (Universal), en el que al final parafrasea una lección del Dalai Lama sobre qué sentido tiene gastarse la salud trabajando para ganar un dinero que hará falta para recuperar la salud.

“Hoy soy una cosa totalmente diferente, con otro tipo de valores y he aprendido mucho a gestionar el tiempo”, asegura, antes de enunciar la máxima que ha decidido aplicar en concreto a su vida profesional: “No puedo volver a estar 200 días en la carretera intentando huir de mi mundo”.

Una canción a su hija

Antonio Orozco charla con EFE de 'El tiempo no es oro', del que ha dicho que es "el mejor disco" de su vida y que llega este viernes al público después de un proceso de cambio físico y terapia mental para el artista catalán, con la que ha logrado enfrentarse a algunos de sus monstruos personales. EFE/ Zipi

Como una metáfora de cómo eran las cosas, en el arranque del disco un teléfono suena sin respuesta mientras de fondo toca la orquesta que se dio el capricho de grabar en los estudios Abbey Road de Londres.

“Cuando me llamaban, no lo cogía porque estaba en un mundo hostil. No quería compartir nada porque me veía mal y me sentía peor”, dice de una etapa en la que no se había dado el tiempo para procesar desgracias personales como la muerte de la madre de su hijo mayor o la de su padre.

En otro momento, canta que “la vida puede dejarnos, pero el amor continuará”, y por eso en la primera parte del disco sobre todo canta a quienes le hacen avanzar, como su hija Antonella, cuya canción de cuna crece y se transforma en uno de los temas más importantes, ‘Te juro que no hay un segundo que no piense en ti’.

“Se trata de dedicarle tiempo a las cosas importantes. Por eso sé que este es el disco más importante de mi vida, porque nunca le había dedicado tanto tiempo a algo”, reflexiona.

Vencer a la depresión

Antonio Orozco charla con EFE de 'El tiempo no es oro', del que ha dicho que es "el mejor disco" de su vida y que llega este viernes al público después de un proceso de cambio físico y terapia mental para el artista catalán, con la que ha logrado enfrentarse a algunos de sus monstruos personales. EFE/ Zipi

Grabado entre Madrid, los estudios La CasaMurada en Banyeres del Penedès (Tarragona) y Londres, y coproducido por él mismo junto a John Caballés, en la segunda parte vuelve la mirada hacia su proceso reciente y la depresión que lo aquejaba en el tema ‘Ni vencedores ni vencidos’.

“En la oscuridad de la noche solo te tienes a ti mismo hasta que no asumes que lo que te está pasando es una enfermedad. Cuando lo asumes y pides ayuda, con otros puntos de vista, tu ansiedad se vuelve pequeña y controlable”, afirma tras anunciar que ahora sí da por vencida su depresión y recomendar acudir a terapia profesional.

Poco después suena ‘607591746’, que lleva por título el teléfono de “una de las personas más importantes” que estuvo en su vida (“Y hasta ahí puedo leer”, señala), y “una canción hecha de canciones” suyas que, en su opinión, “muy pronto se convertirá en la más importante”, al recordar sus comienzos lleno de ilusión.

“Echo de menos a esa persona todos los días, desde que me levanto hasta que me acuesto”, destaca el catalán, tras afirmar que conectará porque su historia es la de cualquiera: “La de una persona que busca la solución para tener el alma llena y la nevera también”.

Ahora, con la energía reequilibrada y un aspecto renovado (“No hay nadie en el mundo que quiera pesar 30 kilos de más”, dice tras “74 días consecutivos” fiel a su cita con el ejercicio matutino), se prepara para la “gira de su vida”, con citas como el Palau Sant Jordi de Barcelona el 28 y 29 de noviembre o el Movistar Arena de Madrid el 10 de diciembre.

“En vez de hacer 70 conciertos, mi propuesta para este año es hacer 25. Porque también ha cambiado el hecho de querer más y más. Ahora quiero más, pero estar en mi casa con mi familia”, afirma “emocionado de pensar que han pasado 25 años” desde que empezó en esto y, a pesar de ello, estar “en el mejor momento de todos”.

Javier Herrero.