Apagón y defensa: doble cita parlamentaria de Sánchez entre ataques de socios y oposición

El presidente del Gobierno, Pedro sánchez, durante una de sus intervenciones en la sesión de control al Ejecutiv en el Congreso. /Archivo.EFE/ Chema Moya

José Miguel Blanco

Madrid, 3 may (EFE).- Si algunas de las comparecencias del presidente del Gobierno ante el pleno del Congreso para informar de asuntos variados se convierten en una suerte de pequeños debates sobre el estado de la nación, la que habrá el próximo miércoles promete situarse entre las que más pueden asemejarse a ello.

Pedro Sánchez se comprometió a informar al Parlamento del plan que semanas atrás aprobó el Consejo de Ministros para que España cumpla este mismo año su compromiso de llegar a un gasto en defensa correspondiente al 2 % de su PIB.

Contrastando su agenda y la de la Cámara baja, se eligió el miércoles 7 de mayo para dar cuenta de ese plan industrial y tecnológico que prevé una inversión adicional de 10.471 millones de euros para lograr el objetivo.

Pero cuando se decidió esa fecha España aún no había sufrido el histórico apagón eléctrico cuyo origen todavía se sigue investigando y del que el jefe del Ejecutivo anunció que informaría también a las Cortes.

El pleno más cercano convocado en el Congreso es el de la próxima semana, que vivirá finalmente una comparecencia acumulada: aumento de la inversión en defensa y un análisis de la situación provocada por el corte de suministro que dejó a oscuras a la Península.

No se antoja especialmente tranquila por tanto esa cita parlamentaria para Sánchez, con la mayoría de sus socios de investidura en contra de aumentar el gasto militar y con una oposición que pone el foco en esas discrepancias entre los aliados y que a la vez pide responsabilidades por el apagón eléctrico.

Toca informar

Fuentes del Gobierno consultadas por EFE asumen ese escenario y que pueda haber otro agrio cara a cara con el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, a pesar de que aseguran que Sánchez ha querido tener gestos con él como la llamada telefónica de esta semana en la que hablaron sobre la caída eléctrica.

La rescisión del contrato de compra de balas a una empresa israelí o la decisión judicial de procesar junto a otras diez personas a David Sánchez, hermano del presidente, en la investigación de la adjudicación de una plaza en la Diputación General de Badajoz, son asuntos que dan por hecho que se colarán en el debate.

Como por hecho puede darse que el contraataque del presidente del Gobierno incluirá entre sus argumentos el reproche a los populares por no arrimar el hombro en asuntos de interés general para el país, máxime después de que el pasado miércoles el PP certificara que no apoyará el plan para paliar las medidas arancelarias impuestas por Estados Unidos y diera por cerradas las negociaciones.

Tampoco faltará previsiblemente la repetida acusación a Feijóo de seguir dictados de Vox y alguna referencia a la continuidad de Carlos Mazón al frente de la Generalitat valenciana.

Pero más allá de todo ello, lo que toca, se subraya desde el Gobierno, es dar detalles del aumento de la inversión en defensa y que cada grupo parlamentario “se retrate” ante un plan que no tendrá que ser votado por el Congreso, lo que evita una casi segura derrota del Ejecutivo a no ser que el Partido Popular le diera un improbable respaldo.

En cuanto al apagón eléctrico, Sánchez, en un debate que enfrentará posiciones sobre las centrales nucleares, reiterará el mensaje de que se adoptarán todas las medidas necesarias para que no vuelva a ocurrir, pero no se prevé que aclare el origen del fallo porque el resultado de la investigación abierta para determinarlo se reconoce que aún puede tardar tiempo en llegar.

Cumplir los compromisos

No hay preocupación en Moncloa ante el hecho de que de esa doble comparecencia pueda derivarse una imagen de soledad que recalcan que no tendría ningún efecto en la práctica.

Lo importante, señalan, es dejar claro que el Gobierno cumple con sus compromisos, como el relativo a la inversión en defensa a menos de dos meses de la primera cumbre de la OTAN en el actual mandato del presidente estadounidense, Donald Trump.

O trasladar al Parlamento y a la ciudadanía que se actuó con prontitud cuando la Península se quedó a oscuras, que se recuperó la normalidad en menos de 24 horas y que se van a poner todos los medios para que no se repita.

Camino del ecuador de la legislatura, la comparecencia del miércoles fotografiará una vez más las dificultades del Gobierno para sumar apoyos y, al mismo tiempo, la determinación de Sánchez de seguir adelante.

Seguir avanzando pese a todo. Incluso sin nuevos presupuestos, porque la realidad lleva ya a esperar el momento no muy lejano en el que anuncie oficialmente que desiste de intentar aprobar las cuentas del Estado para este año y emplazar a una futura negociación para las de 2026.