Segovia, 24 jun (EFE).- El yacimiento del Abrigo de San Lázaro (Segovia), donde -gracias al descubrimiento de una piedra con la huella dactilar más antigua del mundo- se cree que vivieron los últimos neandertales antes de su extinción, ha aparecido lleno de basura y deteriorado, según ha denunciado este martes el equipo de arqueólogos que iba a comenzar la nueva campaña de excavaciones.
El yacimiento se ubica en las inmediaciones del Santuario de la Virgen de la Fuencisla y es célebre por haberse encontrado allí hace tres años un canto rodado de granito en el que un neandertal dejó su huella intencionalmente hace 43.000 años.
Cuando los investigadores han acudido esta mañana a comenzar una nueva campaña de excavaciones, han retirado el cerramiento provisional del yacimiento, que estaba compuesto por vallas de obra y lonas, y se lo han encontrado lleno de basura y en un estado lamentable.
«Estaba lleno de restos de basura y deteriorado en su integridad con respecto al cerramiento anterior», se han quejado los responsables del proyecto en una nota de prensa en la que califican la situación como un atentado contra «uno de los patrimonios culturales más singulares e interesantes de la ciudad y provincia de Segovia, Castilla y León y de España».
El director de las excavaciones, David Álvarez Alonso, ha lamentado lo ocurrido y ha alertado sobre la falta de protección del enclave.
El Abrigo de San Lázaro, junto con el Abrigo del Molino y la cueva de La Tarascona, forma parte de un conjunto de yacimientos arqueológicos de relevancia en el valle del Eresma.
Desde el punto de vista geoarqueológico, San Lázaro es el más rico y amplio de los tres y ha proporcionado hallazgos de relevancia mundial.
Entre ellos, destaca el descubrimiento en 2022 del objeto de arte mueble pintado más antiguo del continente europeo, asociado a ocupaciones neandertales y único en su categoría.
Esta pieza, hallada en un nivel musteriense del yacimiento, es el único objeto de arte mobiliar pintado por neandertales que se conoce hasta la fecha, lo que refuerza la excepcionalidad del enclave a nivel científico.
La Junta de Castilla y León reconoció esta relevancia en abril de este año, al declarar el conjunto de yacimientos como Bien de Interés Cultural (BIC).
En dicha resolución, el Gobierno autonómico subrayó que los hallazgos, especialmente los procedentes del Abrigo de San Lázaro, constituyen “un gran impacto científico» y merecen ser preservados con la máxima protección patrimonial.
El equipo de arqueólogos está valorando los daños antes de tomar una decisión sobre la campaña que arrancaba hoy y que tenía como objetivo ampliar el conocimiento sobre las fases de ocupación neandertal en el valle del Eresma, así como recuperar nuevos materiales arqueológicos que permitan profundizar en las formas de vida y expresión simbólica de estas poblaciones humanas del Paleolítico Medio.