Argüello pronostica un sucesor en sintonía con la línea iniciada por el papa Francisco

El Arzobispo de Valladolid y presidente de la Conferencia Episcopal Española, don Luis Argüello, comparece en rueda de prensa ante los medios de comunicación tras el fallecimiento del Papa Francisco. EFE/R.García

Valladolid, 21 abr (EFE).- El presidente de la Conferencia Episcopal y arzobispo de Valladolid, Luis Argüello, ha afirmado este lunes que el próximo papa “seguirá la pauta que la Iglesia inició con Francisco”, la cercanía con los más pobres, y “reforzando las líneas del Concilio Vaticano II”.

La comunión misionera “ha venido para quedarse en esta época de transformación”, ha argumentado Argüello durante una rueda de prensa celebrada en Valladolid horas después de conocerse el fallecimiento del papa, al día siguiente de su última aparición pública, el Domingo de Resurrección durante la Misa de Pascua.

“No existe ninguna razón concreta para especulaciones pero tengo la confianza en que el nuevo papa será el que precise la Iglesia y la vida social del mundo, que es especialmente desafiante”, ha agregado Argüello antes de afirmar: “Seguramente el cónclave nos dará alguna sorpresa”, aunque no ha querido desarrollar este apunte.

Cuatro españoles

Cuatro cardenales representarán a la Iglesia de España en el cónclave encargado de elegir a un nuevo pontífice: el arzobispo de Madrid, José Cobo; el emérito Carlos Osoro; el expresidente de la Conferencia Episcopal Antonio Cañizares; y Ángel Fernández Artime, con responsabilidades en la curia vaticana.

Todos ellos son menores de ochenta años o están a punto de cumplirlos en los próximos meses, requisito para participar en un cónclave que comenzará después de nueve días de las exequias por Francisco y de las subsiguientes Congregaciones Generales, una especie de diálogos entre papables previos a esa reunión de la alta curia.

Sea quien sea el sucesor, Argüello ha recordado que dentro de la Iglesia queda “el magisterio de los pontífices” a través de textos, discursos, encíclicas donde “permanecen sus orientaciones”, en el caso de Francisco la dimensión social, el protagonismo de la periferia y la defensa de la dignidad de los excluidos.

El suyo ha sido un pontificado “acorde con la transformación social que vive el mundo y la Iglesia”, ha agregado antes de descartar la posibilidad de que Francisco, consciente del inminente final de su pontificado, hubiera allanado el camino hacia algún candidato o procedencia territorial concreta.

“No lo creo. Estoy seguro de que no ha hecho un camino previo porque él siempre ha creído en la libertad”, ha subrayado el presidente de la Conferencia Episcopal, quien viajará a Roma para asistir a las exequias de Francisco aunque no podrá participar en el cónclave por no ser cardenal.

Experiencia y magisterio

Cada papa, ha proseguido en su análisis, “ha aportado la experiencia que ha traído de su Iglesia concreta: Juan Pablo II el nazismo y el comunismo en su Polonia natal; Benedicto XVI la de una Alemania en plena crisis de la civilización occidental; y Francisco la de un mundo en gran transformación social y cultural”.

El Jueves Santo el papa se desplazó a una cárcel en Roma para lavar los pies a varios internos y este Domingo de Resurrección apareció en público durante la Misa de Pascua con una homilía “que no pudo leer pero en la que aparecía la frase ‘corramos al encuentro de cristo crucificado”, ha desvelado.

“Parece que se ha aplicado sus mismas palabras” con una muerte, horas después, “que su presencia en la Misa de Pascual no hacía presagiar”, ha concluido.