Attenborough enfatiza en un nuevo documental la importancia vital del océano para el planeta

Fotografía de archivo del naturalista británico David Attenborough. EFE/EPA/VICKIE FLORES

Londres, 5 may (EFE).- Un nuevo documental del reputado naturalista británico David Attenborough, cuyo estreno mundial en Londres será este día 6, enfatiza la “importancia vital” del océano para preservar la supervivencia del planeta.

‘Ocean, with David Attenborough’ podrá verse también en abierto dos días después, el 8, en el Reino Unido y en otros 26 países, coincidiendo con el 99 cumpleaños del veterano divulgador.

Además, se espera que el estreno mundial de la cinta en televisión y plataformas de ‘streaming’ como National Geographic, Disney+ y HULU se producirá a finales de este año.

En el filme, Attenborough sumerge al espectador en un viaje sobrecogedor en el que subraya que el océano es ahora “nuestro mayor aliado frente a la catástrofe climática”.

“En los últimos cien años, científicos y exploradores han revelado notables nuevas especies, épicas migraciones y ecosistemas sorprendentes y complejos más allá de cualquier cosa que podría haberme imaginado cuando era joven”, apunta el comunicador.

“En este filme -dice- compartimos algunos de esos maravillosos descubrimientos, descubrimos por qué nuestro océano está en tan mala salud y, quizás, lo más importante, mostramos cómo se puede restaurar hasta volver a tener salud”.

Attenborough muestra espectaculares secuencias de barreras de coral, bosques de algas y remarca con su inconfundible voz que el océano es “el sistema de apoyo de vida del planeta” al tiempo que lamenta que éste se encuentre ahora “ante una encrucijada”, en la que los humanos estamos “secando la vida” de sus aguas.

El biólogo español Enric Sala, que ejerció de asesor científico en el documental, explicó por escrito a EFE que proteger el océano de la explotación humana “es lo mínimo que podemos hacer para preservar nuestro sistema de soporte vital”, además de ser algo “imprescindible para la supervivencia de la humanidad”.

Hace ocho años, al estrenar su documental ‘Blue Planet II’, Attenborough logró causar un enorme impacto que sirvió entonces para generar una revolución en la manera en que las personas utilizamos los plásticos. Ahora, con esta cinta, trata de lograr un efecto similar frente a otras prácticas destructivas que afectan a la diversidad de vida marina.

De acuerdo con Sala, la práctica más nociva en el océano es la pesca de arrastre de fondo, que ocupa parte del foco del documental.

“Ninguna otra película ha mostrado cómo es realmente la pesca de arrastre bajo el agua. Ver como esas grandes y pesadas redes raspan el fondo marino y matan todo lo que encuentran a su paso es desgarrador”, describió.

En este sentido, Sala recordó que una investigación reciente en la que participó descubrió que esta práctica en aguas europeas cuesta a la sociedad hasta 11.000 millones de euros, por las emisiones de carbono que se producen al remover el sedimento del fondo marino.

Del mismo modo, aseguró a EFE que también perjudican la “desinformación” y la idea errónea de que establecer áreas marinas protegidas tiene un coste para la industria pesquera.

“En el documental se escucha de los propios pescadores la importancia de las áreas de veda para su sustento y supervivencia económica. El peor enemigo de los pescadores es la sobrepesca”, aseveró el biólogo español.

La cinta también condena el “colonialismo moderno en el mar”, donde enormes jábegas, que operan desde las costas de países que dependen del pescado para obtener su alimento, son responsabilizadas de menguar las capturas de pesca local.

Attenborough observa cómo los tiburones o las tortugas podrían no sobrevivir a cientos de miles de embarcaciones industriales de arrastre de fondo que compiten hoy con la vida marina y con las comunidades pesqueras locales “en cada esquina del océano”.

Según dijo a medios británicos, “la idea de arrasar una selva causa espanto y, sin embargo, hacemos lo mismo bajo el agua cada día. Seguramente, podemos alegar que es ilegal”.

El documental narra historias inspiradoras de recuperación oceánica en lugares en los que está vetada la pesca destructiva, como en la Isla de Arran (Escocia).

“El océano puede recuperarse más rápido de lo que nos podamos imaginar: puede regresar a la vida”, afirma Attenborough.