Quito, 31 may (EFE).- Ecuador necesita “dinamizar su economía, atraer inversiones y generar empleo”, según el diagnóstico realizado por el Banco Mundial (BM) y la Corporación Financiera Internacional (IFC, por su sigla en inglés), que confían en que el presidente del país andino, Daniel Noboa, pueda desarrollar esta misión en el nuevo mandato para el que fue reelegido hasta 2029 y que inició recientemente.
“Venimos de un periodo bastante positivo. Este último año y medio fue un mandato corto, pero muy productivo”, señaló en una entrevista EFE el vicepresidente del Banco Mundial para América Latina y el Caribe, Carlos Felipe Jaramillo, tras haberse reunido esta semana junto a su homólogo del IFC, Alfonso García Mora, con Noboa en Quito.
Ambos reconocieron que “el ambiente económico internacional” no garantiza el mejor escenario para “dinamizar” los mercados latinoamericanos, pero resaltaron el potencial que tiene Ecuador pese a la coyuntura y proyecciones internacionales.
Este año, el Banco Mundial dio una proyección de crecimiento para la región de apenas un 2,1 %, la más baja del mundo en comparación a las demás regiones del planeta. Por su parte, el Banco Central de Ecuador apostó por un 2,8% de crecimiento en el país, superando la contracción del 2 % que sufrió en 2024.
El papel de los inversores privados

Entre las promesas económicas de Daniel Noboa para este mandato está el impulso de inversores privados. “En el caso de Ecuador sí existe potencial para movilizar capital privado”, reseñó García Mora, el vicepresidente para Europa, América Latina y el Caribe de la IFC, el brazo del Grupo Banco Mundial encargado de financiar el sector privado de países en desarrollo.
Pese a que el volumen de inversión sobre el PIB sea hoy en día bajo en Ecuador, García Mora comentó que “la situación de liquidez del país y los bancos existe”. La clave está en asentar la certidumbre para que las empresas tomen decisiones de inversión a largo plazo.
“Los dos sectores donde vemos más potencial son el agropecuario y pescador y las infraestructuras”, detalló el vicepresidente de la IFC. En 2022, la Corporación Financiera Internacional anunció un préstamo de 45 millones de dólares para colaborar con la descarbonización de las camaroneras y mejorar la resiliencia del sector. “También hay potencial para apoyar a la industria del cacao, café y flores”, señaló.
En cuanto a las infraestructuras, García Mora (IFC) destacó que Ecuador requiere una “inversión importante en carreteras y puertos”, una problemática que a su criterio podría solucionarse articulando asociaciones público-privadas (APP) y “realizando reformas” que fomenten la financiación de carácter no estatal.
Otra vía para impulsar la economía ecuatoriana es la apuesta por las pymes. Desde la IFC no pueden desembolsar préstamos directamente para las pequeñas y medianas empresas, sino que son las entidades bancarias las que reciben el importe del crédito. “(El objetivo es) seguir concediendo financiación a estos bancos para que, a su vez, llegue a las pymes”, explicó García Mora.
Empresas extranjeras
Los datos de 2024 sobre la inversión extranjera en el país latinoamericano fueron los peores de la última década. Según el Banco Central de Ecuador, apenas se llegó a los 232 millones de dólares; menos de la mitad que el año anterior.
Sin embargo, y como reseñó Jaramillo, también se redujo “un montón el ‘riesgo país’ (prima de riesgo)”, que actualmente está en torno a los 900 puntos, menos de la mitad que antes de llegar Noboa al poder en 2023. “Estoy seguro que tiene la intención de seguir bajándolo y eso va a abrir las puertas a más inversión”, auguró el representante del BM.
Por su parte, García Mora sostuvo que “cuando un inversor extranjero tiene que decidir en qué país invertir, busca cuál es la certidumbre a largo plazo que le da el país”.
“Por eso, las reformas y la certidumbre que el presidente está introduciendo en la economía es importante para esa atracción. Además, la inversión extranjera directa en el país a día de hoy es muy pequeña, por lo tanto hay un potencial claro de entrada”.
Andrea Farnós