Belén Gopegui: “El arte debe distraer pero también explicar por qué necesitamos evadirnos”

La escritora Belén Gopegui Durán cree que el arte debe servir como distracción pero también ayudar a eliminar las circunstancias por las que necesitamos tanto evadirnos de la realidad, propósitos que aplica a su nueva novela, 'Te siguen', relato de resistencia, espionaje y vínculos en tiempos del capitalismo de la vigilancia. "Nos han instilado la idea de que no podemos controlar nada", remarca en una entrevista con EFE la escritora -que ha empezado a firmar también con su segundo apellido- que pone a los cuatro personajes de la novela que acaba de publicar con Penguin Random House a demostrar que existe la posibilidad de influir en las fuerzas que modelan la sociedad, aunque parezca una tarea imposible. EFE/ Blanca Millez

Marina Estévez Torreblanca

Madrid, 6 mar (EFE).- La escritora Belén Gopegui Durán cree que el arte debe servir como distracción pero también ayudar a eliminar las circunstancias por las que necesitamos tanto evadirnos de la realidad, propósitos que aplica a su nueva novela, ‘Te siguen’, relato de resistencia, espionaje y vínculos en tiempos del capitalismo de la vigilancia.

“Nos han instilado la idea de que no podemos controlar nada”, remarca en una entrevista con EFE la escritora -que ha empezado a firmar también con su segundo apellido- que pone a los cuatro personajes de la novela que acaba de publicar con Penguin Random House a demostrar que existe la posibilidad de influir en las fuerzas que modelan la sociedad, aunque parezca una tarea imposible.

Según su tesis, si las corporaciones no estuvieran preocupadas por el activismo social “no estarían trabajando tanto tiempo para que no sucedan cosas, no pedirían informes, no intentarían infiltrarse en el movimiento, no tratarían de que los sujetos estén permanentemente enganchados para obtener beneficios y obtener estabilidad”, reflexiona.

Por eso, en su novela, las interacciones amorosas, personales, laborales y de militancia entre Casilda, Jonás, Minerva y León dan lugar a una obra entre el ‘thriller’ y la novela de ideas que dialoga con ‘Historia de dos ciudades’.

En el clásico de Charles Dickens “una pareja está preparando la Revolución Francesa, y hay un momento en que el marido flaquea y dice ‘es que no vamos a ver todo esto por lo que estamos luchando’. Y ella responde ‘no importa, porque nada de lo que hagamos estará perdido”, recita Gopegui.

La autora -nacida en Madrid en 1963- no pretende generar ningún sentimiento de culpa o reproche en quien permanece inactivo frente a las desigualdades: “primero porque no es un sentimiento agradable y luego porque no sé si es muy útil”, señala. Pero sí admite que “hay algo de advertencia en el sentido de que entre resistir y dejarse llevar creo que es mejor hacer algo”.

Sí que ha pretendido hablar de “cómo nos construyen como sujetos” y cómo lo que pensamos que es “absolutamente nuestro yo individual, después se demuestra que ha sido generado”. “Es imposible que haya tanta homogeneidad cuando somos sujetos únicos”.

Una de las opiniones que nos inyectan a través de la autoayuda, determinadas formas de terapia y narraciones en la red, es “esta idea de que yo lo valgo y no tengo por qué rectificar, porque mis defectos son lo más mío y otras personas, allá ellas”, expresa.

Frente a estas corrientes, reivindica la voluntad de rectificar y recuerda la figura del personaje de la mitología griega Neoptólemo, que frente a los héroes que se caracterizan por perseguir sus objetivos hasta el final tiene la valentía de cambiar de idea cuando ha ido a cumplir una orden y asumir las consecuencias de tomar otra decisión.

“Me parecía que ahí hay algo en parte liberador y en parte necesario para la vida”, dice Gopegui, que frente al mantra de que no tenemos control ni somos responsables de nada, considera que “también es una carga vivir en un mundo donde tienes que dejarte llevar hoy para aquí y mañana para allá”.

Por este mismo motivo, ella ha decidido incluir una nota al inicio de su obra en la que se opone a que su novela sea utilizada para entrenar cualquier tipo de inteligencia artificial, presente o futura. Aunque supone que individualmente no tendrá muchas consecuencias, “si muchísimas personas lo pusieran, como mínimo se podrían generar demandas que hicieran ruido”.

Gopegui Durán es autora, entre otras, de ‘La escala de los mapas’ (1993), ‘Tocarnos la cara’ (1995), ‘La conquista del aire’ (1998), ‘Lo real’ (2001), ‘El lado frío de la almohada’ (2004), ‘El padre de Blancanieves’ (2007), ‘Deseo de ser punk’ (2009), ‘Acceso no autorizado’ (2011), El comité de la noche (2014) y ‘Quédate este día y esta noche conmigo’ (2017).