Salvador Martínez Mas
Berlín, 11 jun (EFE).- El auditorio principal del Observatorio Archenhold, en Berlín, recuerda este mes la presentación en la que Albert Einstein dio a conocer hace 110 años su Teoría de la Relatividad General en una conferencia pública que fue uno de los grandes hitos de la ciencia moderna.
La presencia de una estatua de cera de Einstein presentada este miércoles en ese observatorio constituye uno de los eventos con los que Berlín y la comunidad científica marcan estos días los cien años y una década de la presentación de la Teoría de la Relatividad General.
En 1919, observaciones realizadas durante un eclipse solar ofrecieron las pruebas de los planteamientos revolucionarios de Einstein, algo que contribuyó a una fama mundial que alcanzaría definitivamente al ganar el Premio Nobel de Física en 1921 por su explicación del efecto fotoeléctrico.
«Hoy estamos celebrando los 110 años de la presentación de la Teoría de la Relatividad General en el lugar donde la presentó», dijo a EFE Tim Florian Horn, presidente de la Fundación Planetario de Berlín, institución responsable de las instalaciones del Observatorio Archenhold, reconvertido en un museo para la divulgación científica.
Teoría de la relatividad para el pueblo

«Lo particular de aquella presentación fue que la hizo ante gente normal, no ante un rey u otros científicos, sino ante gente común. A ellos les explicó por qué la gravedad es una distorsión del espacio-tiempo y cómo el tiempo en cercanía de la masa se comporta de forma diferente, e incluso por qué era probable que existieran agujeros negros», añadió Horn junto a una representación del científico.
Se trata de una figura del museo de cera de la capital alemana, Madame Tussaud Berlin, una fiel representación del científico alemán de 1,65 metros de altura y un peso aproximado de 20 kilogramos.
Vestido con un jersey de cuello largo de color beige, pantalones marrones oscuros de pana y zapatos de cuero, la representación del museo de cera berlinés trata de captar lo pragmático que era Einstein al vestirse, según reconocieron a EFE desde el Madame Tussaud Berlin.

Un Einstein sin calcetines
Tanto es así que el Einstein junto al que Horn explicó la importancia del aniversario de la presentación de la teoría de la relatividad no lleva calcetines, pues «él decía que no tenía sentido llevarlos», apuntó a EFE Paola López Petzoldt, responsable de comunicación del Madame Tussaud Berlin.
La simplicidad de la vestimenta de Einstein contrasta con la sofisticación científica que puso en marcha con sus cálculos y planteamientos físicos, unos postulados que supo comunicar en su día porque «era un genio de la ciencia pero también de la comunicación», según Horn.
No hay que perder de vista que, hasta la llegada de la Teoría de la Relatividad General, se pensaba desde hacía cientos de años que el tiempo y el espacio eran «eternos e inmutables», pero «Einstein nos mostró que todo era relativo», recordó el presidente de la Fundación Planetario de Berlín.
Fiesta bajo el lema: «Todo es relativo»
«El tiempo y el espacio van juntos de la mano y la concentración de masa hace que el tiempo varíe y se desvíe la luz. Sólo la idea de que el espacio se expanda es una consecuencia de la Teoría de la Relatividad General», destacó Horn.
El próximo sábado las instalaciones del Observatorio Archenhold, levantado a finales del siglo XIX, celebrará un evento público en el que se festejarán los 110 años de la presentación de la teoría que cambió el modo en que la humanidad ve el universo.
«Todo es relativo», es el lema de la cita, para la cual se han añadido a las instalaciones del histórico observatorio berlinés una serie de obras artísticas inspiradas en los avances científicos facilitados por las teorías de Einstein.