Bilbao da inicio a 9 días de fiesta con reiteradas apelaciones al respeto y la convivencia

La Marijaia (Señora de las Fiestas) protagoniza hoy sábado el primer día de la Semana Grande de Bilbao tras el pregón y el txupinazo. EFE/Miguel Tona

Bilbao, 16 ago (EFE).- Bilbao ha dado este sábado el pistoletazo de salida a los nueve días de fiesta que conforman la Aste Nagusia 2025 que, en su 45ª edición, ha arrancado con una apelación unánime al «respeto» y la convivencia.

La txupinera Olatz Agirre Sagarna (2i) lanza el txupinazo hoy sábado en el balcón del Teatro Arriaga en el primer día de la Semana Grande de Bilbao. EFE/Miguel Tona

Con temperaturas más suaves que las del viernes, cuando rondaron los 40 grados, y un cielo totalmente cubierto, multitud de jóvenes se han concentrado en la Plaza del Arriaga desde media tarde a la espera del txupinazo, que este año ha corrido a cargo de la comparsera Olatz Agirre (Txori Barrote).

Mientras tanto, las autoridades han ido llegando al Teatro Arriaga desde poco antes de las 18:00 horas, encabezadas por el alcalde Juan María Aburto para tomar parte de la tradicional recepción que el Ayuntamiento ofrece a las autoridades y representantes de la sociedad de la Villa.

En declaraciones a los medios, el regidor bilbaino ha reiterado el mensaje que ya había trasladado 24 horas en la Basílica de Begoña y ha apelado a que «reine el respeto a las personas, las ideas, los derechos humanos y a la policía».

Alrededor de las 19.00 horas, ya asomados a la balconada del Teatro Arriaga y con el habitual protagonismo de Marijaia -símbolo de la Semana Grande diseñado en 1978 por Mari Puri Herrero-, ha sido Francis Díez, líder del grupo Doctor Deseo, el encargado de llevar a cabo la lectura del pregón.

En su alocución, ha hecho un llamamiento a la «transgresión, aunque ha reclamado «respeto entre diferentes». «Que todos colaboremos para que estas fiestas sean un lugar seguro, libre de agresiones machistas, racistas, homófobas… no es no y sí es sí», ha defendido, al tiempo que ha apostado por «seguir gritando no al genocidio del pueblo palestino».

Un año más, se han podido ver algunas pancartas con mensajes políticos, a favor de la de la independencia y de la vuelta «a casa» de los presos de ETA, así como de rechazo al proyecto de Guggenheim de Urbaibai, reivindicaciones feministas y banderas palestinas.