La Paz, 27 ago (EFE).- El Gobierno de Bolivia reportó que desde el 1 de agosto y hasta este miércoles hay 83.223 hectáreas afectadas por los incendios forestales que se registran, en su mayoría en parques y reservas naturales del país.
El viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes, informó que uno de los lugares más afectados es el parque nacional Noel Kempff Mercado, ubicado en la región oriental de Santa Cruz, que actualmente registra 70.000 hectáreas quemadas.
Precisó que la segunda zona más afectada es la cordillera de Sama, en la región de Tarija (sur), donde son 6.420 hectáreas quemadas, y después está el Área Natural de Manejo Integrado (ANMI) San Matías, en Santa Cruz, que reporta 4.314 hectáreas afectadas.
«En el parque Tunari, en Cochabamba (centro), que quemaron 437 hectáreas; en el parque nacional Carrasco, también en Cochabamba, hay 2.052 hectáreas, haciendo un total hasta la fecha de 83.223 hectáreas», señaló Calvimontes.
Según el viceministro, del total de las hectáreas arrasadas por el fuego el 80 % corresponden a arbustos y pastizales y el 20 % «a árboles que se pueden considerar zonas boscosas».
«Los parques y reservas naturales son los más afectados. Sin embargo, en comparación con 2024 estamos lejos de alcanzar esas cifras», afirmó.
Actualmente hay cuatro incendios activos, dos en la región oriental de Santa Cruz, uno de ellos en el parque Noel Kempff Mercado y los otros dos en la región amazónica de Pando.
Calvimontes señaló además que 89 focos de calor son combatidos por equipos de primera respuesta y 1.346 militares.
El Gobierno boliviano declaró hace una semana la «emergencia nacional» con el propósito de agilizar la coordinación interna y la llegada de apoyo internacional para combatir los incendios forestales en el país.
«Para proteger nuestro medio ambiente, la salud de las personas, la biodiversidad y las actividades de la población boliviana, en Gabinete aprobamos el Decreto Supremo que declara Situación de Emergencia Nacional ante la presencia de incendios forestales y el inminente riesgo de su propagación en el territorio nacional», indicó el presidente Luis Arce.
Los incendios forestales arrasaron más de 12 millones de hectáreas en 2024 y dejaron a Bolivia con «la mayor crisis ambiental» de su historia, lo que significa que no podrá recuperar lo que se perdió en más de cuatro meses de intensas quemas en bosques, pastizales y reservas naturales.
El Gobierno declaró en septiembre del año pasado el «desastre nacional» debido al impacto de los incendios y a la ayuda que recibió de otros países para sofocarlos.
Los incendios son un problema recurrente en Bolivia y se atribuyen sobre todo a los ‘chaqueos’ o quemas controladas autorizadas para preparar los suelos para la siembra y el pastoreo.