Boric no asistirá al funeral del papa y designa una delegación que representará a Chile

El presidente de Chile, Gabriel Boric, en una foto de archivo. EFE/ Lucía Goñi

Santiago de Chile, 22 abr (EFE).- el presidente de Chile, Gabriel Boric, no asistirá a las exequias del papa Francisco, fallecido a los 88 años en su residencia de la Casa Santa Marta la madrugada del lunes y en su lugar, el mandatario designó una delegación de “alto nivel” que representará al país en los actos fúnebres del pontífice.

Según informó la cartera de Relaciones Exteriores a través de un comunicado, en representación del Estado chileno viajarán a Roma el presidente del Senado, Manuel José Ossadón; el presidente de la Cámara de Diputadas y Diputados, José Miguel Castro; y el canciller Alberto van Klavaren, en tanto el mandatario participa de una visita oficial en Brasil que se extenderá hasta el 24 de abril.

Los funerales del papa Francisco se realizarán el próximo 26 de abril en la Basílica de San Pedro, Ciudad del Vaticano.

Entre 15 y 20 días después de la muerte del sumo pontífice, se reunirá un selecto grupo de 135 cardenales, todos menores de 80 años -donde solo hay un chileno-, para desarrollar el cónclave papal, instancia en que se encerrarán en la Capilla Sixtina para elegir al nuevo líder de la Iglesia católica con una votación que se extenderá hasta que uno de los candidatos obtenga una mayoría de dos tercios.

Pese a ser un país laico, el lunes el mandatario chileno, considerando que a un gran porcentaje de la población que profesa la religión católica, decidió decretar duelo nacional por tres días “siguiendo la tradición de Chile (…) tal como lo hiciera el presidente Ricardo Lagos en su momento cuando falleció el papa Juan Pablo II”.

La última aparición del papa Francisco fue el domingo 20 de abril en Pascua de Resurrección donde difundió un sucinto mensaje con visibles dificultades de salud.

Tras la renuncia de Benedicto XVI al pontificado —primer papa moderno en dimitir— Francisco fue elegido el 13 de marzo de 2013, a los 76 años, en la quinta votación efectuada durante el segundo día de cónclave.

Jorge Bergoglio, argentino y arzobispo de Buenos Aires, se convirtió entonces en el primer papa americano de la historia.