Madrid, 4 ago (EFE).- Bruno Fernando (Luanda, 1998), jugador angoleño del Real Madrid, reveló que el ataque de ansiedad que sufrió ante Unicaja en el segundo partido de las semifinales de la Liga Endesa la pasada temporada, fue debido a un «cúmulo de frustración que llevaba acumulando desde hacía tiempo» y que necesitaba «explotar» de alguna manera para encontrar una mejor versión de sí mismo.
Así lo confesó el pívot durante una entrevista con EFE este lunes en Madrid, donde la selección de Angola ha afrontado la última fase de amistosos ante Argentina, justo antes de poner rumbo hoy mismo a Angola, sede de la próxima edición del Afrobasket, del 12 al 24 de agosto.
Como él mismo explicó, su adaptación al baloncesto europeo, al que llegó a finales de enero para enrolarse en las filas del Real Madrid tras su paso por la NBA, está siendo «una experiencia totalmente diferente», de la que todavía está «aprendiendo». Fernando dejó una de las imágenes de la temporada al retirarse al vestuario entre lágrimas en un partido de las finales de la acb ante Unicaja, en lo que fue un momento de «extrema frustración».
«Al final de la temporada me sentía frustrado con muchas situaciones. Pero bueno, ¿el baloncesto es eso, no?. Altibajos. Fue un momento de extrema frustración que ya se había acumulado durante un tiempo y necesitaba expresar de alguna manera; no tuvo que ver con fallar un tiro o perder un rebote, fue un gran número de cosas mías, en términos individuales, que necesitaba sacar para poder seguir con el trabajo y encontrar de alguna manera una buena versión de mí mismo. Fue algo que sucedió esa misma noche, pero al día siguiente ya estaba recuperado», reflexionó.
Tras el episodio de ansiedad ante Unicaja, solo unas semanas después, Fernando firmó sus mejores partidos con la camiseta blanca en las finales ante el Valencia Basket, donde en tres partidos promedió 9,6 puntos y 5 rebotes, por lo que espera, que desde la próxima campaña, en la que por primera vez comenzará desde la pretemporada y a las órdenes del nuevo entrenador, Sergio Scariolo, consiga estar «en mejores condiciones» y aportar su «granito de arena» al equipo.
Sobre la salida de Chus Mateo del Real Madrid, Fernando se mostró agradecido al ya extécnico blanco, al que calificó de persona y entrenador «excelente»: «Es una persona excelente y un entrenador fuera de serie. Creo que es alguien que lo dio todo por el equipo y por la organización. Siempre quería ganar. Le tengo todo el respeto, cariño y consideración por haberme considerado una opción, por haberme dado la oportunidad de venir aquí. Le deseo lo mejor en su carrera. Nunca se sabe, el mundo del baloncesto es tan pequeño que quizá algún día nos volvemos a cruzar».
A sabiendas de la exigencia de «luchar por todos los títulos» en el Real Madrid, el angoleño valoró los nuevos fichajes del equipo para la próxima temporada, David Krämer, Gabriele Procida, Théo Maleon y Chuma Okeke, estos dos últimos con los que ha coincidido en la NBA, y dijo que todos llegan «con un perfil y unas características» que el equipo «necesitaba».
«A Théo le conozco un poco, porque también estuvimos juntos en Houston Rockets durante una pequeña etapa. Luego se fue a Charlotte. Contra Chuma he jugado varias veces. Nos va a ayudar mucho en la posición de ‘4’, lo necesitábamos mucho y nos va a dar más respiro. Creo que puede defender casi todas o incluso todas las posiciones en el campo», analizó.
Respecto a las posibilidades de Angola en el Afrobasket, Fernando no ocultó que la selección angoleña, líder en el palmarés del torneo con 11 títulos e invicta durante 10 años (desde 2001 a 2011), siempre se le coloca como favorita, aunque ahora se encuentre en un periodo de «relevo generacional», y admite que es una «ventaja» poder jugar ante su público.
«Por muchos cambios que hayan habido en esta generación, la raíz sigue siendo la misma. El baloncesto angoleño sigue siendo el baloncesto angoleño. Creo que hoy en día tanto a nivel individual como técnico colectivo, las selecciones tienen un nivel más alto que en el pasado. Siempre somos favoritos, pero también tenemos que dar crédito al resto. Hay que entender que el hecho de jugar en casa no significa que automáticamente seamos campeones. Tendremos que luchar por ello», aseveró.
Como el seleccionador angoleño, Pep Clarós, indicó a EFE en una entrevista, Fernando muchas veces actúa de «falso alero», una posición nueva para él y que como el propio pívot señala le hace salir de su «zona de confort», aunque todo es bienvenido para «ayudar al equipo».
Asimismo, Fernando carga con el peso de ser el primer jugador de Angola en jugar en la NBA, algo que «entiende y acepta», aunque solo trata dar lo mejor de sí mismo y ayudar en el trabajo colectivo: «Las expectativas son totalmente diferentes cuando se trata de mí, y lo acepto de una manera muy cómoda porque al final, todo es baloncesto».
«Tengo que ser responsable de aceptar mis tareas e intentar dar lo mejor de mí mismo en la competición, sin salirme de lo que sé que solo yo sé hacer, y no dejar que esa misma presión se me suba a la cabeza y me impida hacer el trabajo del colectivo. Aun así, soy consciente del nivel de presión que viene de la gente por ser el primer jugador de mi país en la NBA», finalizó.
Pedro Martín