Estrasburgo (Francia), 9 sep (EFE).- La comisaria europea de Gestión de Crisis, Hadja Lahbib, aseguró este martes en el Parlamento Europeo que los incendios forestales ocurridos este verano en los países del sur de Europa demuestran la necesidad de invertir más y mejor en medidas de prevención.
«El mensaje de este verano es alto y claro: Europa debe centrarse más en la prevención de incendios antes de que comiencen. Necesitamos inversiones más orientadas y políticas inteligentes para (tener) unos entornos resilientes a los fuegos», dijo Lahbib ante los eurodiputados.
Advirtió de que «Europa es el continente que más rápido se calienta», el doble que la media global desde la década de los 80, lo que «significa que tiene que estar más preparada que nunca para las olas de calor y los incendios».
Los fuegos, afirmó, «no pillaron por sorpresa» a la Comisión Europea, puesto que la institución había adoptado «medidas firmes» para prepararse, por ejemplo con expertos vigilando «hora a hora» la situación de los bosques, con equipos de bomberos de apoyo a los profesionales locales o con los mapas de Copérnico a su disposición.
Aun así, continuó, «han ardido más de un millón de hectáreas», según los datos de Bruselas hasta el día 3 de septiembre, lo que supone un área» más grande que Chipre»; con España y Portugal representando más de la mitad de las hectáreas quemadas.
La comisaria de Gestión de Crisis apuntó que los incendios de este verano demuestran que la Unión Europea (UE) está «mejorando, anticipando y respondiendo mejor y más rápido», pero al mismo tiempo se debe «hacer mucho más en prevención y preparación».
«Los incendios seguirán siendo un reto, pero podemos prepararnos mejor y reducir al mínimo su impacto. Con una prevención más sólida, una preparación más inteligente y solidaridad, Europa puede proteger sus bosques y también a su gente», insistió.
Tras el discurso de Lahbib tomó la palabra el eurodiputado del Partido Popular Raúl de la Hoz, quien pidió que el debate sea «un punto de inflexión» para conseguir que «cuando vuelva a haber incendios» las autoridades públicas sean capaces de dar una respuesta «más ágil, eficaz y rápida», sin «discursos demagógicos».
Por parte del PSOE, Leire Pajín defendió la necesidad de «ser conscientes» de que existe una «emergencia climática» que aumenta la probabilidad de catástrofes naturales como los incendios frente a los que hay que tener, entre otras cosas, planes de gestión forestal «durante todo el año», infraestructuras y recursos humanos bien financiados.
Diego Soler, diputado que concurrió inicialmente con SALF y ahora milita como independiente, criticó que las autoridades regionales y nacionales en España se culpen «unos a otros» mientras la sociedad civil «salió una vez más al rescate», al tiempo que instó a «actuar desde ya o el año que viene se dará la misma situación».
El representante de VOX Jorge Buxadé cargó después contra los «políticos que gobiernan» y que le dicen al «hombre de campo» que «la culpa es del cambio climático» cuando «todo el mundo sabe que es de los pirómanos, los que encienden la mecha y los que impulsan leyes criminales».
En nombre del PNV, Oihane Agirregoitia lamentó que se repitan «los debates y ataques» que ya sucedieron a raíz de la dana de octubre del año pasado y que se utilicen los desastres naturales para «mentir sobre el cambio climático, atacar al de enfrente y enredar sobre ámbitos competenciales».
La eurodiputada de BNG Ana Miranda demandó un «plan de futuro para lo rural» y, además, utilizó su intervención para cargar contra el presidente de Galicia, Alfonso Rueda, a quien acusó de «ocultar la realidad» en una gestión de los incendios que, posteriormente, fue defendida por los eurodiputados gallegos del PP Francisco Millán Mon y Adrián Vázquez.
Por su parte, la eurodiputada de Sumar Estrella Galán preguntó a los eurodiputados del Partido Popular «hasta cuándo van a seguir atados al negacionismo de la extrema derecha» y les acusó de estar «desinvirtiendo» en prevención, a pesar de tener «el mayor poder territorial» en España.