Carmen Weiler concentra las opciones del equipo español

Fotografía de archivo de Carmen Weiler. EFE/ Cati Cladera

 Madrid, 26 julio (EFE).- Carmen Weiler regresa a Singapur, donde la joven nadadora española pasó su infancia y adolescencia, dispuesta a dar el salto definitivo y alcanzar en los Mundiales que se disputan en la ciudad asiática la final que se le escapó por apenas unas centésimas en los pasados Juegos Olímpicos de París.

«Creo que va a estar peleando por ello y que tiene posibilidades de lograrlo dado el estado de forma en el que está, pero luego será la competición la que dirá, porque el nivel de las pruebas femeninas de espalda es altísimo», señaló en declaraciones a EFE el director técnico de la Federación Española, Santi Veiga.

Un desafío que ejemplifica mejor que nada el momento en el que la natación española afronta unos Campeonatos del Mundo de Singapur que pondrán el punto de partida a un ciclo olímpico en el que España «quiere ganar peso» en la competición internacional.

«El objetivo lo tenemos claro. Tenemos que pelear por tener presencia en el mayor número de finales posibles. Queremos llegar a los Juegos de Los Ángeles como un equipo con mayor peso en la competición y para ello hay que estar en las mayores finales posibles, empezando ya por este Mundial», explicó Veiga.

Plazas de finalista por las que no sólo peleará Carmen Weiler, que tras el nuevo récord de España -58.53- que estableció el pasado mes de junio partirá con la cuarta mejor marca de todas las participantes en los 100 espalda.

Junto con Weiler, de 20 años, figuran en la lista de aspirantes a colarse en la ronda final la ilerdense Emma Carrasco, de tan sólo 19 y que ya fue semifinalista en los 200 estilos en los Juegos de París, o el asturiano Arbidel González, que alcanzó las semifinales de los 200 mariposa tanto en los dos últimos Mundiales como en la pasada cita olímpica.

Carles Coll quiere brillar también en piscina larga

Un paso adelante que también quiere dar el tarraconense Carles Coll que deberá demostrar en Singapur que es capaz de brillar en la piscina larga de la misma manera que lo hace en la corta, en la que se coronó el pasado mes de diciembre campeón del mundo de los 200 braza.

«El reto para Carles, un nadador cuyas características se adaptan muy bien a la piscina corta, es trasladar su rendimiento en corta a la piscina larga, porque ahora es mucho más bajo. Queremos que dé ese salto y si con ello está en disposición de pelear por estar en una final, perfecto», aseguró Veiga.

Todo un desafío que el director técnico de la Federación confía en que no se vea truncado por incertidumbre en la que Coll ha vivido los últimos meses a causa de los problemas surgidos para prolongar su estancia en Estados Unidos, donde estudia y entrena, y que ya le impidieron participar en las pruebas de selección para el Mundial.

Tonrath y Hoek abanderan la nueva generación

Si Weiler, Carrasco o Arbidel González serán los encargados de aportar, pese a su juventud, la experiencia a un equipo español, integrado por nueve hombres y siete mujeres, la balear Estella Tonrath, de 18, y sobre todo el catalán Luca Hoek, de 17 años, pondrán la efervescencia juvenil.

Jóvenes que acuden a Singapur con el objetivo principal de ganar experiencia internacional, pero sin descartar nada tras brillar, y de qué manera, hace apenas tres semanas en los Europeos júnior disputados en la ciudad eslovaca de Samorin.

Una cita en la que Tonrath revalidó el oro que logró un año antes sin necesidad de acercarse al récord de España absoluto que fijo el pasado mes de junio con un tiempo de 2:08.03 minutos y que permitirá a la mallorquina partir con la sexta mejor marca de todas las participantes en Singapur.

¿Dónde están los límites de Luca Hoek?

Pero si alguien ha desatado la ilusión ese es el jovencísimo Luca Hoek tras convertirse en Samorin en el primer español en bajar de la barrera de los 22 segundos en los 50 libre (21.99) y nadar los 100 en 48.25 segundos.

Nuevas plusmarcas nacionales que Hoek, que competirá en Singapur en los 100 libre además de los relevos, parece en disposición de rebajar en la cita universal en competencia con los mejores nadadores del mundo.

«Gestionar todo lo que conlleva una gran competición absoluta es más difícil que una júnior, por lo que lo normal es que no nade tan rápido en Singapur, pero él tiene la capacidad y la preparación para nadar lo más rápido posible en los Mundiales», concluyó Veiga.