Chile, optimista sobre el futuro del huemul, el ciervo en extinción más austral del mundo

Fotografía del 8 de febrero 2025 cedida por la fundación Rewilding Chile donde aparece un huemul en Cabo Froward, Magallanes (Chile). EFE/ Fundación Rewilding

Santiago de Chile, 15 ago (EFE).- Dos descubrimientos recientes de subpoblaciones de huemules en la Patagonia chilena han despertado la esperanza y llenado de optimismo a las organizaciones ambientalistas que luchan contra reloj para proteger al ciervo más austral y amenazado del mundo, del que solo quedan 1.500 ejemplares entre Chile y Argentina.

El último hallazgo tuvo lugar la semana pasada, cuando la ONG Puelo Patagonia confirmó -a través del registro de cámaras trampa- la presencia de un grupo de hasta ocho huemules en Puchegüín, en la región de Los Lagos, a 1.000 kilómetros al sur de la capital.

Se trata del registro más al norte que se tiene de este ciervo emblemático de la Patagonia andina, declarado en peligro de extinción en 1973 y del que solo queda el 1 % de su población original, distribuida en grupos muy pequeños y fragmentados.

Fernando Novoa, investigador de Fauna de Puelo Patagonia, explicó a EFE que el descubrimiento «contribuye a redefinir el rango conocido de distribución del huemul» y «da una luz de esperanza sobre la posibilidad de que haya más subpoblaciones no descubiertas en áreas desconocidas».

Los ejemplares descubiertos, además, «se ven saludables, con una condición corporal buena y sin enfermedades, como ocurre con otras subpoblaciones más al sur», agregó.

«Especie paraguas»

Fotografía del 8 de febrero 2025 cedida por la fundación Rewilding Chile donde aparecen huemules en Cabo Froward, Magallanes (Chile). EFE/ Fundación Rewilding

La pérdida y degradación de su hábitat, la caza ilegal, los pumas o las enfermedades transmitidas por el ganado fueron diezmando drásticamente esta especie, famosa por su extrema sensibilidad.

Su conservación no solo es crucial por su valor intrínseco, sino también por su rol como «especie paraguas», ya que son grandes dispersadores de semillas y su protección beneficia a numerosos ecosistemas y otras especies.

La revista Ecography le identificó como una de las 20 especies cruciales en el mundo para liderar la restauración de los ecosistemas.

«Los huemules funcionan como semáforos de la salud del ecosistema donde habitan, de ahí su relevancia. Si su condición numérica mejora, es una buena señal de que ese ecosistema no está amenazado», señaló a EFE Cristián Saucedo, director de Vida Silvestre de Rewilding Chile.

Con esta idea, el Gobierno chileno y Rewilding Chile lanzaron en 2023 el llamado «Corredor Nacional del Huemul», una iniciativa público-privada para reducir las amenazas sobre la especie e impulsar iniciativas de conservación y monitoreo.

«Ninguna organización por sí sola ni el Estado solo pueden hacerse cargo de este desafío», aseguró Saucedo.

«Más conciencia»

Unas semanas antes del hallazgo en Puchegüín, en Cabo Froward, donde el continente americano se hunde en las frías aguas del Estrecho de Magallanes, la propia Rewilding Chile confirmó la presencia de otra subpoblación de al menos cinco huemules nunca antes documentada.

El aislamiento natural de la zona -uno de los rincones más remotos y prístinos de la Patagonia- fue un factor clave para su conservación.

«Es una especie que vive en bajísimas densidades e identificar subpoblaciones requiere mucho trabajo porque, por lo general, habitan en lugares muy altos, por eso esto es una gran celebración», subrayó Saucedo.

Mariano de la Maza, de la estatal Corporación Nacional Forestal (CONAF), advirtió a EFE que «los nuevos registros no necesariamente significan que esté aumentando la población, sino los esfuerzos de monitoreo para dar con subpoblaciones en lugares no rastreados antes».

Uno de los pioneros en luchar contra la extinción del huemul fue la Fundación Huilo Huilo, que hace 20 años fundó un pionero centro de conservación para reproducir a estos mamíferos en ambientes controlados y reintroducirlos en los bosques de la región de Los Ríos, donde llevaban extinguidos desde la década de los 80.

La fundación informó en febrero de otro gran hito que no ocurría desde hace más de tres décadas: la migración natural un huemul nacido en libertad en Huilo Huilo hacia Argentina.

«Noticias como el cruce de Newenche o los descubrimientos hechos por nuestros colegas habrían pasado desapercibidas hace años», admitió el director ejecutivo de la fundación, Rodolfo Cortés.

«Ahora -concluyó- hay mucha más conciencia de la importancia del huemul y de hacer esfuerzos conjuntos no solo por descubrir más subpoblaciones sino por asegurar su supervivencia a largo plazo».

María M.Mur