Pekín, 9 oct (EFE).- China endureció este jueves su pulso comercial con Estados Unidos al anunciar nuevos controles a la exportación de materiales estratégicos utilizados en la industria tecnológica, un movimiento que llega a falta de pocas semanas para la posible reunión entre el presidente chino, Xi Jinping, y su par estadounidense, Donald Trump.
Este nuevo paquete de restricciones se centra, una vez más, en las tierras raras, unos elementos esenciales para la fabricación de vehículos eléctricos, pantallas táctiles y paneles solares y que desde hace más de medio año se encuentran en el epicentro de las disputas entre Washington y Pekín.
Con el argumento de «salvaguardar los intereses y la seguridad nacional» de China, el Ministerio de Comercio del gigante asiático anunció hoy la imposición de controles adicionales sobre las tecnologías relacionadas con tierras raras, como la minería, fundición, separación y reciclaje de estos minerales.
China, que controla más del 70 % de la producción mundial y casi el 90 % del procesamiento de este material estratégico, ha impuesto restricciones a su exportación como baza negociadora desde que Trump comenzó la guerra arancelaria en abril, si bien recientemente había relajado las medidas en medio de la tregua comercial entre ambas potencias.
Las nuevas restricciones, que llegan poco antes de un encuentro previsto entre Xi y Trump a finales de octubre en Corea del Sur, en el marco de la reunión de líderes del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), se aplicarán tanto a las empresas chinas como a las extranjeras.
No obstante, estas últimas necesitarán un permiso especial para exportar imanes y otros materiales producidos fuera de China, pero que contengan en su composición al menos un 0,1 % de metales u óxidos de tierras raras de origen chino.
Por otro lado, las firmas extranjeras que exporten bienes, tecnologías o «servicios no controlados» deberán solicitar una licencia de exportación si saben que estos serán empleados en actividades relacionadas con la minería, fundición, separación o reciclaje de tierras raras, apuntó la cartera de Comercio, que aclaró que el suministro sin autorización de estos elementos está prohibido.
Horas después de anunciar estas medidas, sin hacer alusiones directas a EE.UU., el Ministerio oficializó nuevos controles de exportación sobre los artículos relacionados con la producción de baterías de litio y con diamantes sintéticos empleados en el sector tecnológico.
Las restricciones incluyen baterías de iones de litio de alta densidad energética, junto con los equipos y materiales necesarios para su fabricación, desde los componentes del cátodo y ánodo hasta los materiales catódicos a base de manganeso y los dispositivos para producirlos.
La cartera de Comercio también incorporó controles a polvos y cristales de diamante sintético, además de sierras, muelas y equipos de deposición química por plasma utilizados en su procesamiento, materiales conocidos como «diamantes de laboratorio», que tienen aplicaciones clave en la industria tecnológica y electrónica.
Otras 14 entidades sancionadas
En un paso más en la andanada de medidas, el Ministerio de Comercio chino añadió este jueves a catorce empresas y organizaciones extranjeras, la mayoría de ellas del ámbito de la defensa y con sede en Estados Unidos, a su «lista de entidades no confiables», en aras de «salvaguardar la soberanía, la seguridad y los intereses de desarrollo nacional» de China.
Entre las firmas sancionadas se encuentran Dedrone by Axon, AeroVironment, BAE Systems y TechInsights y sus filiales, así como la subsidiaria estadounidense de Elbit, DZYNE Technologies, Epirus, Exelis y VSE Corporation.
Estas entidades tendrán prohibido realizar actividades de importación y exportación vinculadas con China y efectuar nuevas inversiones en el país asiático, y las organizaciones e individuos dentro del país tampoco podrán mantener transacciones, cooperaciones ni ningún otro tipo de relación comercial con ellas.
En un comunicado aparte, la cartera explicó que varias de las empresas incluidas en esta lista «han mantenido cooperación en materia de tecnología militar con Taiwán (isla autogobernada que Pekín considera una «provincia rebelde»), publicado declaraciones maliciosas sobre China y ayudado a Gobiernos extranjeros a reprimir a empresas chinas».
Este conjunto de medidas podría complicar el devenir de las conversaciones comerciales entre Xi y Trump, que acordaron el mes pasado verse en Corea del Sur durante la cumbre de la APEC, tras una llamada telefónica que contribuyó a aliviar las tensiones comerciales entre ambas potencias y a acercar posturas en torno a la red social china TikTok.