Beirut, 4 ago (EFE).- Varios cientos de personas marcharon este lunes por las calles de Beirut para conmemorar el quinto aniversario de la explosión que dejó más de 200 muertos y 6.500 heridos en la ciudad, donde volvieron a pedir justicia, con la investigación judicial todavía en marcha un lustro después.
Un año más, los familiares de las víctimas convocaron dos marchas paralelas, una desde la capitalina Plaza de los Mártires y otra desde la estación de bomberos en el barrio de Karantina, que perdió a diez efectivos en la zona cero mientras trataban de contener el incendio que dio lugar a la explosión.
La de Karantina salió encabezada por un camión de bomberos del cuartel, que circuló junto a los manifestantes haciendo sonar las sirenas y ondeando en su mástil una enorme bandera libanesa manchada de rojo como símbolo de la sangre derramada hace cinco años.
En silencio, los participantes portaron fotografías de los fallecidos y también de heridos como Lara Hayek, mostrando una comparativa de la joven antes de la tragedia y de las secuelas que sufre «aún en el hospital cinco años después», reza una de las pancartas.
Ambas marchas confluirán frente al puerto de Beirut, donde se originó la tragedia, para tomar parte en un acto conmemorativo.
También está previsto que a las 18.00 hora local (15.00 GMT), cerca del momento en que ocurrió la deflagración el 4 de agosto de 2020, se pare toda la actividad en el recinto portuario para realizar un minuto de silencio, hacer sonar las bocinas de los barcos y elevar las grúas en señal de respeto.
La investigación judicial de la deflagración, provocada por cientos de toneladas de nitrato de amonio almacenadas en el puerto de la ciudad durante más de seis años sin medidas de protección, ha sido obstaculizada constantemente por ex altos cargos y funcionarios sospechosos en el caso.
El magistrado a cargo de la pesquisa, Tarek Bitar, se vio obligado a suspenderla de forma casi ininterrumpida desde finales de 2021 hasta comienzos de este año, cuando pudo ser retomada tras una serie de cambios al frente de las autoridades judiciales y el nombramiento de un nuevo Gobierno.