San Salvador, 10 ago (EFE).- Unas 200 personas protestaron este domingo en El Salvador contra la construcción de un centro de convenciones en una zona boscosa cercana a la capital, conocida como El Espino, y pidieron que la obra se realice en otro lugar.

Los participantes recorrieron varios kilómetros cerca del lugar en el que se pretende realizar la construcción de una nueva sede del Centro Internacional de Ferias y Convenciones (CIFCO), que sería donado por China. Para este proyecto, la Asamblea Legislativa autorizó la transferencia de más de 55.700 metros cuadrados de terreno de una antigua zona cafetalera.

La antigua sede del CIFCO fue adaptada en 2020 por el Gobierno salvadoreño para funcionar como hospital destinado a atender a personas afectadas por la COVID-19, y desde entonces opera como el Hospital El Salvador.
Gabriela Capacho, del movimiento Todos Somos El Espino, dijo a EFE que su petición es que se construya «en un lugar donde no represente la tala del bosque», por lo tanto, han propuesto que se ubique en la zona donde se está construyendo un nuevo estadio nacional, también donado por China.
Añadió que, aunque el terreno no abarca la totalidad de la exfinca El Espino, es parte del «pulmón de San Salvador» y la tala de arboles pone en riesgo a las comunidades aledañas de inundaciones, deslaves e incendios, además del desplazamiento de la fauna.
Adelantó que han reunido unas 26.000 firmas digitales para presentarlas a la Asamblea Legislativa, la Presidencia y la embajada de China para mostrar su descontento y se replantee el lugar de construcción.
Los manifestantes marcharon vistiendo camisas con mensajes a favor de la protección del medio ambiente y portando pancartas con lemas como: ‘Juntos podemos salvar el bosque’, ‘El futuro debe ser verde’ y ‘El progreso no vale si perdemos nuestra naturaleza’.