València, 13 may (EFE).- La Generalitat valenciana ha clausurado este martes el primer gran punto de tratamiento de residuos de las riadas de la dana del 29 de octubre, ubicado en Catarroja (Valencia), en el que se han reutilizado el 40 % de las toneladas recogidas.
Según un comunicado de la Generalitat, el president, Carlos Mazón, ha asistido al cierre del Punto de Transferencia de Residuos de Catarroja, uno de los tres grandes espacios destinados a estos procesos, donde se han gestionado 250.000 toneladas de residuos, la misma cantidad que genera la ciudad de València en un año.
Mazón ha destacado la labor del Consell en la gestión de los residuos generados por las riadas de octubre «en un contingente que no tiene precedentes en España» y que ha permitido «en tiempo récord clausurar el primer gran punto de tratamiento», mientras que los otros dos se cerrarán antes del verano.
El Punto de Transferencia de Residuos de Catarroja ha gestionado 250.000 toneladas con un tratamiento que permite separar la tierra de otras materias y reutilizarla en canteras, agricultura o construcción, gracias al cual solo seis de cada diez toneladas tratadas se llevarán al vertedero.
En esta instalación se han extraído 92.720 toneladas de tierra, que ya se están utilizando en diferentes canteras, agricultura y construcción, y 1.554 de otros residuos como neumáticos, colchones, escombros, plásticos y bombonas, que también serán reutilizados.
Mazón ha subrayado el trabajo del Consell para retirar 130.000 vehículos y terminar con las campas que los almacenaban, así como para «avanzar hacia la normalidad» con el cierre de los 60 puntos de acumulación municipal y las plantas de tratamiento tras el verano.
Asimismo, ha destacado la inversión de la Generalitat de 180 millones para gestionar las más de 800.000 toneladas de escombros que generó en total la riada, el equivalente al 10 % de los residuos anuales de toda España.
El president ha explicado que el municipio castellonense de La Llosa es el primero en utilizar 5.000 toneladas de tierra recuperada de las zonas afectadas tratadas en los tres puntos de transferencia, para nivelar el terreno
En el punto de Catarroja se han gestionado unas 11.500 entradas de camiones, entre los propios, militares, de Tragsa y empresas de servicios, que han realizado 10.300 viajes para sacar residuos hasta un depósito controlado. Además, se han extraído 500 coches y decenas de camiones.
Este dispositivo tenía tres fases. En las dos primeras, los equipos desplegados evacuaron una media superior a las 15.000 toneladas diarias, lo que permitió despejar en las primeras semanas «los 767 viales obstruidos en las poblaciones más afectadas», ha explicado Mazón.
Estos residuos se depositaban en puntos creados de forma extraordinaria, como los puntos de acopio local (PAL), cercanos a los cascos urbanos, y, posteriormente, en puntos de transferencia a vertederos, donde se han tratado. En la tercera fase del plan, que está concluyendo ahora, se han vaciado 60 PAL.
