Sofía Barba
Toledo, 5 jun (EFE).- El toledano Justino Martín ha llegado a la plaza de Zocodover de Toledo antes de las dos de esta madrugada para hacer cola y tener asegurada una de las 2.400 sillas que salen de alquiler al público en la carrera procesional del desfile del Corpus Christi el próximo 19 de junio.
Cuando el quiosco de la plaza de Zocodover ha abierto, a las diez de la mañana, ya había decenas de vecinos esperando, algunos desde horas antes, para asegurarse un sitio en las zonas más cotizadas de la procesión, algo que refleja el arraigo que el Corpus Christi tiene en esta ciudad y que trasciende generaciones.
Justino Martín ha sido el primero de la fila y ha explicado a EFE que ha llegado al kiosco a la 1:50 horas con su hija para coger cinco asientos (a once euros cada uno) para la familia en la calle Comercio (calle Ancha para los toledanos).
Ha contado que, como toledano, el Corpus Christi es un evento fijo en su calendario, sin embargo ha detallado que es el primer año que hace la fila ya que, por costumbre, era su madre quien realizaba la espera pero por edad «ya no puede».
De esta forma, Justino y su hija han pasado la noche sentados, charlando y tampoco han estado solos porque a las 2:30 horas ha empezado a venir más gente.
Por ejemplo Teo Orol, que también ha llegado a las 2:30 horas y ha dicho a EFE que «siempre le toca ir» y que para él es una cita fija que seguirá así «hasta que el cuerpo aguante».
El Ayuntamiento saca a la venta 2.400 sillas que se distribuyen en puntos estratégicos del recorrido para que pueda seguirse la procesión de manera más cómoda. Los puntos más destacados por los vecinos son las plazas de Zocodover y de San Vicente y las calles Alfonso XII y Comercio.
«Me gusta ver la procesión en la calle Ancha, me subía mi mamá desde chiquitita, después he traído yo a mis hijos, es una tradición», ha enfatizado Felisa del Moral, otra vecina de la ciudad.
Familias enteras se han organizado este jueves para hacer relevos, como explica Javier Mayoral, que ha sustituido a las ocho de la mañana a su tío, quien, a su vez, había llegado a las cinco de la madrugada con el objetivo, familiar, de obtener ocho asientos.
Toledo ultima los preparativos para la fiesta del Corpus Christi, que tendrá su punto álgido el 19 de junio, con la procesión que discurrirá por 2,4 kilómetros engalanados por más de 6.000 elementos decorativos, 4.000 metros de guirnalda y, como novedad este año, tres grandes murales tejidos con 80.0000 metros de hilo. EFE
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