Colau denuncia «maltratos» en Israel y emprenderá acciones contra un Estado «neofascista»

La exalcaldesa de Barcelona Ada Colau, en sus primeras declaraciones al llegar al Aeropuerto de Barcelona-El Prat, junto al concejal barcelonés de ERC Jordi Coronas, tras ser liberados hoy por Israel, ha denunciado este domingo los "abusos y maltratos" a los activistas de la Global Sumud Flotilla detenidos en Israel, por los que emprenderá "acciones", y ha hecho un llamamiento a la movilización para parar los pies a este "Estado terrorista neofascista" israelí. EFE/Toni Albir

Barcelona, 5 oct (EFE).- La exalcaldesa de Barcelona Ada Colau ha denunciado este domingo los «abusos y maltratos» a los activistas de la Global Sumud Flotilla detenidos en Israel, por los que emprenderá «acciones», y ha hecho un llamamiento a la movilización para parar los pies a este «Estado terrorista neofascista» israelí.

Así lo ha dicho en sus primeras declaraciones al llegar al Aeropuerto de Barcelona-El Prat, junto al concejal barcelonés de ERC Jordi Coronas, tras ser liberados hoy por Israel.

Rodeada de dirigentes de Comuns como Jéssica Albiach o David Cid, que han acudido a arroparla, Colau ha narrado «una experiencia muy dura» a partir de «la detención ilegal» de los activistas -que ha definido como un «secuestro en aguas internacionales»-, tras el cual fueron llevados a un puerto donde les esperaban «centenares de policías muy agresivos, muy violentos», que los maltrataron.

Los mantuvieron durante horas «arrodillados en el suelo o con la cabeza contra el suelo», entre «gritos, insultos, humillaciones», y les arrancaron prendas de ropa y collares, antes de llevarlos a una «horrible» prisión de alta seguridad en el desierto, donde continuó el «trato denigrante».

El trayecto del puerto a la prisión en furgonetas policiales, según Colau, también «fue durísimo», porque los activistas llevaban muchas horas sin beber agua, sin comer y sin dormir y porque les habían quitado ropa y encendieron el aire acondicionado para que pasaran frío durante el viaje.

Ya de madrugada llegaron a la prisión, donde siguieron sufriendo «cosas terribles», les despojaron de la ropa que les quedaba y les dieron unas camisas blancas, con las que han regresado a Barcelona.

«Bienvenidos a la nueva Gaza»

Se encontraron entonces, ha explicado Colau, en una «prisión de un Estado fascista», en la que «no se respeta ningún derecho», donde los activistas no tenían acceso a un abogado, estaban «absolutamente incomunicados» con el exterior, no se les permitía ducharse y no se les facilitaban las medicinas que algunos de ellos necesitaban.

«Se han violado todos nuestros derechos», ha denunciado Colau, que estaba encerrada en una celda de «seis por tres» metros junto con quince mujeres.

La celda daba a un patio donde los carceleros habían desplegado «una foto enorme de Gaza devastada por las bombas», con una leyenda en árabe: «Bienvenidos a la nueva Gaza».

Llamamiento a la movilización

Todas esas «situaciones de abusos», de «amenazas» y de «arbitrariedades» que han vivido los activistas de la flotilla, según Colau, «no es nada comparado con lo que sufre la población palestina cada día».

Por ello, ha considerado «muy importante» mantener las movilizaciones para detener el «genocidio» en Gaza, para «abrir corredores humanitarios» y para que el Estado «criminal» de Israel libere a los activistas que «aún están en esa prisión horrible».

Colau ha augurado que habrá «más flotillas y más acciones» frente a un Estado de Israel que «viola todas las leyes internacionales»: «No se puede permitir la impunidad ante toda esta violación sistemática de derechos humanos».

Un dirigente de la CUP, en huelga de hambre

«Emprenderemos todas las acciones para no permitir la impunidad», ha advertido Colau, que ha asegurado que para poder salir de Israel firmó un documento aceptando la deportación inmediata.

Sobre los activistas que no firmaron ese documento y siguen presos, ha dicho que Adrià Plazas, miembro del secretariado nacional de la CUP, está en huelga de hambre, pero no así Pilar Castillejo, presidenta del grupo de la CUP en el Parlamento de Cataluña.

«No sabemos qué pretenden hacer con los compañeros en prisión», ha señalado la exalcaldesa y fundadora de Barcelona en Comú, que ha pedido «no normalizar» lo que está haciendo Israel en Gaza. EFE