Quito, 17 jun (EFE).- La Corte Nacional de Justicia (CNJ) de Ecuador inició este martes el juicio por el denominado caso ‘Reconstrucción’, donde la Fiscalía acusa al exvicepresidente correísta Jorge Glas de peculado (malversación de fondos públicos) por un presunto desvío de dinero en las obras de reconstrucción de las zonas afectadas por el terremoto de 2016.
El inicio del juicio fue aplazado el 6 de junio para que se le practicara una evaluación psicológica y psiquiátrica a Glas, quien ha sido trasladado para la audiencia a Quito desde Guayaquil, donde se encuentra recluido en La Roca, la cárcel de máxima seguridad del país.
Antes de iniciar la audiencia, la defensa de Glas pidió una segunda evaluación tras el peritaje psiquiátrico que concluyó que Glas padece una depresión grave sin síntomas psicóticos, con un cuadro de ansiedad y un riesgo «mayor» de eventual intento de suicidio, lo que fue rechazado por el tribunal.
La defensa de Glas sostuvo que el resultado es «sesgado», pero la jueza no dio paso a la solicitud e instaló la audiencia. De acuerdo al informe de la psiquiatra que lo evaluó, publicado como parte del expediente judicial de la causa en Ecuador, la especialista determinó una «simulación» de cuadro psicótico por parte de Glas al observar «inconsistencia» entre las alucinaciones visuales y auditivas a las que Glas hace mención y su comportamiento durante la evaluación. Incluso, la psiquiatra consideró que las funciones cognitivas de Glas son normales, si bien se mostró «decaído, triste e irritable» y señaló que «es cauteloso y piensa al entregar información» a la vez que «aparenta desorientación en tiempo». El examen determinó que la depresión que sufre Glas no afecta a la conciencia ni a la inteligencia, pero sí reduce su voluntad para las actividades cotidianas como permanecer con tratamiento psicofarmacológico. Así, la evaluadora recomendó «de manera urgente» que se realice una junta médica interdisciplinaria para una nueva evaluación, mientras continúa con el tratamiento psicológico y psiquiátrico. Glas, que este martes ingresó con paso lento a la sala de la CNJ, refirió durante la evaluación que sufre de aparentes alucinaciones tras haber sido testigo de varias masacres entre presos ocurridas en la cárcel de la ciudad de Latacunga, como parte de la serie de matanzas que se dieron desde 2021 en varias prisiones debido a un enfrentamiento entre bandas criminales rivales. Durante la entrevista, Glas también habló de pensamientos suicidas, después de que aparentemente se tratase de quitar la vida hace aproximadamente un año con una sobredosis de fármacos, a los pocos días de haber sido recluido en La Roca tras haber sido detenido dentro de la Embajada de México en Quito. Otras causas Glas, uno de los hombres fuertes del Gobierno de Rafael Correa (2007-2017), cumple en la cárcel una pena ocho años de privación de libertad a raíz de dos condenas por corrupción impuestas en 2017, por asociación ilícita en el caso Odebrecht; y en 2020 por cohecho en el caso Sobornos, donde Correa fue también condenado a ocho años e inhabilitado políticamente. A finales de 2022 fue excarcelado gracias a una polémica e irregular resolución judicial y permaneció en libertad durante algo más de un año, hasta que a finales de 2023 llegó a la Embajada de México en Quito, donde pidió asilo, al advertir que la Fiscalía buscaba procesarlo por el caso Reconstrucción. El actual presidente de Ecuador, Daniel Noboa, ordenó asaltar la sede diplomática de México para detener a Glas el 5 de abril de 2024, una vez que el Gobierno mexicano del entonces presidente Andrés Manuel López Obrador le había concedido el asilo diplomático al considerarlo un «perseguido político» ante los procesos de corrupción que acumula desde 2017. Este episodio llevó a la ruptura de las relaciones entre ambos países y a un litigio en la Corte Internacional de Justicia, donde México acusa a Ecuador de haber roto la inviolabilidad de las sedes diplomáticas y Ecuador culpa a México de haber contravenido los tratados que regulan el asilo diplomático. De acuerdo a la Fiscalía, la investigación del caso ‘Reconstrucción’ determinó la presunta existencia de un abuso de dinero público en beneficio de terceras personas naturales y jurídicas, que fueron contratistas y fiscalizadores de contratos suscritos. Además de Glas, en el juicio por el caso Reconstrucción también están acusado el exsecretario del Comité de Recostrucción de Manabí, Carlos Bernal, mientras que la Justicia sobreseyó la causa para otros siete imputados, entre ellos el exministros correístas Walter Solís, refugiado en México.