Comisario UE: el cambio climático es más grave que la guerra en Ucrania y los aranceles

El comisario europeo de Energía y Vivienda, Dan Jorgensen, en una imagen de archivo. EFE/EPA/RONALD WITTEK

Bruselas, 12 jun (EFE).- El comisario europeo de Energía y Vivienda, Dan Jorgensen, situó hoy el cambio climático como el «mayor problema» al que se enfrenta la Unión Europea, por encima del conflicto bélico en curso en Ucrania y de la actual guerra comercial con Estados Unidos.

«El cambio climático es probablemente el mayor problema al que nos enfrentamos. Hay una guerra en nuestro continente, cierto, pero confío en que pronto se encuentre la paz; tenemos relaciones transatlánticas extrañas y guerras comerciales en curso, sí, pero se estabilizará, encontraremos soluciones», dijo Jorgensen.

El comisario europeo, que se expresó de esa forma en la inauguración en Bruselas de la 10ª conferencia anual sobre eficiencia energética, coorganizada junto a la Agencia Internacional de la Energía (AIE), subrayó que el aumento de las temperaturas y sus consecuencias derivadas tendrán más impacto que otros grandes problemas globales.

«Desafortunadamente, el cambio climático seguirá siendo el mayor problema para todos los que estamos en esta habitación durante toda nuestra vida. Y no es algo que pueda pasar en el futuro, es algo que está ocurriendo ya y que tiene consecuencias catastróficas: inundaciones, sequías, incendios forestales… la gente está muriendo», dijo.

Apostar por la eficiencia energética prevendrá que Rusia pueda volver a usar la energía como arma de guerra contra la UE, que ha reducido su dependencia en los hidrocarburos de Moscú gracias en parte a la diversificación y al despliegue de renovables, pero también a través del ahorro de 15.000 millones de metros cúbicos de gas (bcm) al año.

El político socialdemócrata danés citó como ejemplo cotidiano que una bombilla LED consume un 90 % menos de energía que una tradicional, y que una ducha calentada a través de una caldera solar ahorra de media a una familia europea unos 900 euros al año.

«La eficiencia energética tiene un enorme potencial para el ahorro», subrayó Jorgensen, quien subrayó que es también un vector para conseguir energía accesible y asequible, porque uno de cada diez europeos está en riesgo de pobreza energética y el pasado invierno hubo 47 millones de personas que no pudieron «calentar adecuadamente» su hogar.

Mejorar en eficiencia energética requiere inversiones, pero «pagan de vuelta y lo hacen rápido», agregó el comisario, quien señaló que 1 euro invertido en eficiencia se traduce en 4 euros en ahorros en «pocos años», un retorno que puede alcanzar los 12 euros en el caso de los hogares, por lo que «el potencial es enorme».

El comisario de Energía y Vivienda agregó que «las medidas de eficiencia energética sólo en la UE pueden aportar el 40 % de las reducciones que necesitamos», y gran parte de estas pueden concentrarse en el área de los edificios, que «consumen el 40 % de la energía y pueden ser un 60 % más eficientes».

Aire acondicionado

El director ejecutivo de la Agencia Internacional de la Energía, Faith Birol, dijo que si la UE no hubiera tomado medidas de eficiencia en los últimos 10 años, las importaciones de gas natural serían un 20 % más altas de lo que lo son ahora.

Para la AIE, la eficiencia energética «es el primer combustible,  por delante del petróleo, el gas, la solar, la hidroeléctrica, la nuclear… por delante de cualquier cosa. Y todos los países tienen potencial en eficiencia energética», apuntó.

Birol señaló que la demanda eléctrica está «subiendo muchísimo, mucho más que la demanda energética», y explicó que la gente normalmente cree que se debe a la inteligencia artificial, los centros de datos o los sectores industriales.

Todos ellos desempeñan un papel, pero «el principal vector único de aumento de la demanda eléctrica global es el aumento de los precios de los aires acondicionados», destacó.

«En Japón o Estados Unidos, el 90 % de los hogares tienen aire acondicionado. Pero en Nigeria es el 5 %, en Indonesia es el 19 % y, en India, el 20 %. La gente, con ingresos y temperaturas que aumentan, compran aires acondicionados», explicó.

Y actualmente, un aparato de aire acondicionado medio vendido en el mundo tiene «la mitad de eficiencia energética respecto a las mejores opciones que hay en el mercado», dijo.

«Si incrementásemos la eficiencia, necesitaríamos menos energía, tendríamos más dinero en el bolsillo y reduciríamos las emisiones», resumió Birol, quien recordó que «en los dos últimos años hemos tenido las temperaturas más altas jamás registradas».