‘Crisis o apocalipsis’, un libro «incómodo» que resiste al México “criminal y fallido»

Los activista mexicanos Jacobo Dayán (i) y Javier Siciilia, participan durante una entrevista con EFE este viernes en Ciudad de México (México). EFE/José Méndez

Ciudad de México, 14 jun (EFE).- Las preguntas más «incómodas» acerca de México, «un Estado fallido coludido con el crimen organizado», resisten en ‘Crisis o apocalipsis’ una conversación escrita entre Javier Sicilia y Jacobo Dáyan, dos defensores de la memoria de las víctimas de la violencia, según reflexionaron en una entrevista con EFE.

«El objetivo del libro no es dar certezas, sino plantear preguntas, incomodar», afirmó Dayán, quien explicó que la inspiración vino de lo que el español Jorge Semprún y el rumano Elie Wiesel, sobrevivientes de los campos de concentración de Buchenwald y Auschwitz, hicieron hace 30 años en ‘Es imposible callar’, una obra que reunió la memoria del genocidio más grande de la historia.

En ese entonces, detalló el especialista en derechos humanos, Semprún y Wiesel decían «que nadie quería oírlos», que las víctimas eran incómodas, pero «hoy tampoco las quieren oír».

Por ejemplo, «volteamos la cara» a casos como el Rancho Izaguirre (Teuchitlán, Jalisco), campo de adiestramiento del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), que atrajo la atención, pero «rápidamente desapareció», aseguró.

 Las entrañas del Estado “fallido” mexicano 

En México tenemos un «Estado desfondado» y «coludido con el crimen organizado de una forma casi inextricable (…) Ahí está el Ejército y los capos porque son lo mismo», subrayó Sicilia, quien lleva 14 años en la defensa de las víctimas.

Si no tuviéramos un Estado vacío, «yo creo que no lo hubiera logrado destruir la ‘cuarta transformación’ -término referente al oficialismo-«, sentenció Sicilia sobre las reformas constitucionales impulsadas por el gobernante Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), partido en el poder desde 2018.

Sicilia conoce bien las entrañas del «Estado fallido» mexicano, así fue cuando pasó de poeta a fundador del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad tras el asesinato de su hijo, Juan Francisco Sicilia, en 2011, periodo gobernado por el expresidente Felipe Calderón (2006-2012), quien desató la llamada guerra contra el narcotráfico donde murieron más de 100.000 personas.

El escritor ha dejado el peso del asesinato de Juan en las calles marchando, en los tribunales defendiendo y en la literatura con novelas como el ‘El deshabitado’.

Porque «cuando uno pierde a un hijo es Auschwitz, cuando uno sale de la tortura, si lograste escapar de un secuestro, traes la huella de Auschwitz, porque Auschwitz es la expresión macro del mal», sostuvo.

Entonces, continuó Dayán, «si pensamos salir de donde estamos no es ni con abrazos ni con balazos ni con (Omar) García Harfuch, (actual secretario de Seguridad de México), lo que necesitamos -y que ningún partido político está dispuesto a hacer- es descapturar al Estado y a los partidos de intereses particulares, ya sean económicos o criminales».

«Mientras eso no ocurra, lo que nos digan es irrelevante. El Estado mexicano es un Estado fallido», advirtió sobre un país con más de 127.000 personas desaparecidas.

 La cara del neofascismo

Para analizar el populismo contemporáneo, ‘Crisis o apocalipsis’ cuestiona, desde un punto agnóstico y teológico, el origen del mal con el fascimo nazi (1933-1945) y también profundiza en las dictaduras y los totalitarismos más genocidas, como sucedió con Efraín Ríos Montt (1926-2018) en Guatemala o con Pol Pot (1925-1998) en Camboya.

Y es que hay que cuestionar por qué Donald Trump, Benjamín Netanyahu, Jair Bolsonaro, Viktor Orban, Nicolás Maduro o Andrés Manuel López Obrador son «la opción» más elegida, insistió Dayán.

«El nazismo no entraba por el cerebro, entraba por la carne, por las emociones. Lo mismo ocurre con los populismos de hoy, apelan a ideas simples, a mentiras abiertas, a resentimientos acendrados, a la esperanza de regresar a un mundo idílico que nunca existió, como el Make America Great Again (MAGA)», declaró.

Actualmente, enfatizó, «estamos ante neofascismos, regímenes autoritarios que no son la enfermedad, sino el síntoma».

Alrededor de esta vorágine «está la resistencia» que intenta mantener «la ética y la dignidad», ahí, recordó Sicilia, están las miles de madres buscadoras de México, «rascando la tierra» para encontrar un cadáver que les permita “honrar y aguardar” una respuesta.

Como ellas, confesó el poeta, también espera esa «respuesta transhistórica» de «volver a ver a mi hijo y a los que amé en este mundo».

El activista mexicano Jacobo Dayán, participa durante una entrevista con EFE este viernes en Ciudad de México (México). EFE/José Méndez
El activista mexicano Javier Siciilia, participa durante una entrevista con EFE este viernes en Ciudad de México (México). EFE/José Méndez