Redacción deportes, 4 jun (EFE).- No hay límites para Cristiano Ronaldo, de nuevo protagonista, goleador decisivo en la remontada de Portugal sobre Alemania rumbo a la final de la Liga de Naciones, en la que aguarda a Lamine Yamal y España o Kylian Mbappé y Francia, después de su gol número 138 en 220 encuentros como internacional luso.
En el minuto 68, al límite del fuera de juego, en el tercer pase para el mismo remate que le había servido Nuno Mendes desde la izquierda a lo largo del encuentro, embocó el golpe definitivo y ganador, iniciado antes por el 1-1 de Francisco Conceiçao entre la decepción de Alemania, sostenido después por Marc André Ter Stegen, con tres paradas estupendas.
La vigencia de Cristiano Ronaldo en la era Roberto Martínez es indudable, de nuevo titular y referencia en las semifinales de la Liga de Naciones contra Alemania, en el que fue sustituido ya con el encuentro prácticamente ganado, en el minuto 90.
Al frente de todos, capitán actual, leyenda eterna, ya a sus 40 años, en sus últimos momentos con Portugal, con el Mundial 2026 de Estados Unidos, México y Canadá a la vista, no tan lejano ya para el astro luso, aún es la referencia para Roberto Martínez: ha jugado 24 de los 25 partidos con el técnico, 23 de inicio, con 20 goles.
Su pegada es un argumento contundente. No entiende ni de edades ni de etapas. Más allá de su historia incontestable con Portugal. Abocado a un fin abrupto aparentemente en aquel Mundial de Qatar 2022, cuando enfiló el vestuario entre lágrimas tras la eliminación en los cuartos de final con Marruecos y el conflicto con su entonces seleccionador, Fernando Santos, relegado a una suplencia inaudita, Roberto Martínez lo ha relanzado.
Es su figura, al que trata con un respeto enorme, del que destaca su competitividad, su ascendencia, su carácter y su fútbol, como la referencia en ataque para asaltar la segunda final de la historia de la Liga de Naciones para Portugal, la campeona de la primera edición en 2018-19, pero también sin vencer a Alemania desde hace 25 años.
Cristiano tuvo la primera ocasión. Su zurdazo, tras un control en el área, fue demasiado fácil para Marc André Ter Stegen. En otro tiempo, en el pasado, quizá habría sido gol. También la segunda, cuando su remate se estrelló entre la nube de adversarios que protegían la portería alemana. El árbitro no vio córner. Cristiano sí. Su enfado fue visible.
El gen competitivo de Cristiano Ronaldo sigue intacto. No caduca. Es una característica irreductible en la personalidad del máximo goleador de todos los tiempos de la selección de Portugal, con 137 goles en 220 choques, incluido el actual, desde su primera diana hace 21 años, el 12 de junio de 2004 en una derrota contra Grecia (1-2) en la Eurocopa.
Su insistencia tuvo premio, ya en el minuto 68, cuando Nuno Mendes lo divisó, lo centró al área y lo invitó al gol de la victoria. Aún quiere más con Portugal. No falló Cristiano, que batió a Ter Stegen, en el regreso del portero a la acción con la selección alemana después de casi nueve meses.
Segundo en la fila en el vestuario, azul celeste al completo, justo detrás de Joshua Kimmich, el cancerbero saltó de nuevo al terreno de juego con la selección germana, después de la grave lesión de la rodilla derecha del pasado 22 de septiembre de 2024 ante el Villarreal, cuando se rompió el tendón rotuliano.
Realmente, pese a tanto tiempo fuera de acción, han sido seis encuentros de baja con el conjunto germano, suplido por OIivier Baumann en cuatro choques y por Alexander Nübel en otros dos. Sin él, cuatro victorias (1-2 y 7-0 ante Bosnia, 1-0 ante Países Bajos y 1-2 frente a Italia) y dos empates (3-3 con Italia y 1-1 con Hungría), antes de su reencuentro.
En el Allianz Arena de Múnich, diez minutos después de lo esperado por las condiciones meteorológicas adversas que afectaron al calentamiento de ambos equipos y retrasaron hasta las 21.10 horas el retorno de Ter Stegen, protagonista ya de 43 encuentros, incluido este miércoles, en su carrera como internacional, 38 de inicio.
Desde su debut hace 13 años, el 26 de mayo de 2012, con una derrota por 5-3 contra Suiza en un amistoso, hasta este miércoles, cuando Nagelsmann reafirmó la confianza en el guardameta, incluso tras una lesión tan larga, en un partido de tanta dimensión y complejidad, con apenas el rodaje de dos encuentros con el Barcelona desde su lesión. Su último choque con Alemania databa del 10 de septiembre de 2024 ante Países Bajos (2-2).
Las primeras exigencias fueron menores. Un centro y un remate de Cristiano Ronaldo. El segundo, en buena posición, fue mucho más fácil de lo esperado para el guardameta. El zurdazo del goleador histórico portugués fue un ‘regalo’ para el cancerbero, seguro en sus primeras intervenciones, pendiente de mucho más, de todo lo que es capaz Portugal.
Como demostró después el conjunto luso, sin opción de detener ni el 1-1 de Francisco Conceiçao ni el 1-2 de Cristiano Ronaldo. Y clave después para evitar la goleada, con tres paradas en el tramo final.
Iñaki Dufour