Madrid, 11 mar (EFE).- La proposición no de ley del PP en contra del acuerdo alcanzado entre PSOE y Junts para la delegación de competencias en inmigración para la Generalitat de Cataluña ha provocado críticas de los otros grupos, que han acusado a los populares de “bipolaridad política”, “alarmismo” e hipocresía.
Este martes, el Congreso ha debatido esta proposición no de ley presentada por el PP para instar al Gobierno a cumplir la legislación en extranjería y la Constitución, ejercer sus funciones de control de flujos migratorios y de fronteras “en todos los territorios del Estado” y respetar las competencias exclusivas de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado.
En su exposición, el portavoz del grupo popular, Miguel Tellado, ha pedido al PSOE “recapacitar” y volver a “la senda de la cordura” respecto a este pacto, que, según él, cede las fronteras de Cataluña a los Mossos D’Esquadra, “todo al servicio del delirio separatista y no de los españoles y mucho menos de los catalanes”.
La iniciativa defendida por el PP ha despertado las críticas de los demás grupos intervinientes en el debate -Vox, PSOE, Sumar, Junts, ERC, Podemos, BNG y PNV- por diferentes motivos, con la única excepción del diputado de UPN que ha dedicado su turno de palabra a censurar también la delegación de competencias a Cataluña.
Por un lado, Rocío de Meer, de Vox, ha destinado su tiempo en el debate a criticar la “bipolaridad política” del PP y defender su enmienda a la proposición, en la que incluía medidas como impulsar la devolución al Estado de competencias cedidas en materia de educación o Justicia, que no ha sido aceptada por el PP.
Ha culpado a la formación de Alberto Núñez Feijóo de tener “el copyright” de las regularizaciones masivas por las llevadas a cabo en anteriores Gobiernos; firmar la agenda 2030, que consagró las “fronteras abiertas”, ha dicho, o votar en contra de iniciativas suyas como prohibir las regularizaciones masivas.
Por otro lado, PSOE, Sumar, Junts y ERC han respondido al PP también con duras críticas y una defensa del acuerdo para la delegación de competencias.
En varias ocasiones, los diputados de estas formaciones han recordado que, bajo el Gobierno de Aznar, el Estado transfirió las competencias en tráfico a Cataluña, delegó el control de los puertos o la gestión del 30 % del IRPF y el impuesto sobre el patrimonio y sucesiones.
Néstor Rego, del BNG, también ha normalizado el pacto y lamentado que al PP “los derechos de las personas migrantes le preocupan poco o nada” porque su verdadero interés es “la sagrada unidad de la patria”.
El diputado de Podemos Javier Serna, por su parte, ha cuestionado el pacto entre el PSOE y Junts por “racista”, pero ha señalado al PP que no se les olvida que son “el partido de Albiol, que vincula inmigración y delincuencia como un fascista más” y el que dice que “que acoger ucranianos muy bien, pero que acoger africanos muy mal”.
El PNV ha indicado que se pronunciará sobre el acuerdo para la delegación de competencias en Cataluña cuando este sea el objeto de debate en el Congreso durante su tramitación parlamentaria y no cuando al PP le interesa.
Su diputada Maribel Vaquero ha acusado a este partido de querer “sembrar la alarma y crear polémica con su mantra de que “España se rompe”.
