De errores a plagios, los líos de los políticos con el currículum

Imagen de archivo (25/11/2024) de la vicesecretaria nacional de Movilización y Reto Digital del PP, Noelia Núñez, en una visita a Melilla. EFE/ Paqui Sánchez

Madrid, 23 jul (EFE).- La polémica en torno al currículum de la diputada del PP Noelia Núñez se une a una larga serie de errores, datos falsos y presuntos plagios que han rodeado durante años los currículums de los políticos.

Núñez ha admitido que no ha terminado sus estudios de Derecho y Ciencias Jurídicas de las Administraciones Públicas como por «equivocación» aparece en su ficha personal del Congreso, donde figura con un «doble grado».

La página del Congreso también recogió en su día una inexistente licenciatura en Administración de Empresas del actual presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno; y la del Parlamento Europeo presentó a la socialista Elena Valenciano como licenciada en Derecho y Ciencias Políticas, por un «error de traducción», según alegó la entonces eurodiputada.

En 2018 Carmen Montón dimitió tres meses después de ser nombrada ministra de Sanidad en el primer Gobierno de Pedro Sánchez, tras difundirse presuntas irregularidades en la realización de un máster en la Universidad Rey Juan Carlos.

Esa misma universidad y también un máster dieron problemas a Cristina Cifuentes cuando era presidenta de la Comunidad de Madrid, al cuestionarse algunas de las calificaciones obtenidas para lograr el título, incluso el trabajo de fin de máster.

La causa de Montón se archivó, pero Cifuentes, que dejó el cargo tras difundirse el vídeo de un presunto hurto en un supermercado, llegó a ser procesada. Finalmente fue absuelta y el caso acabó con la condena a dos profesoras.

También Pablo Casado tuvo que dar explicaciones siendo líder el PP por un máster en esa misma universidad, ya que le convalidaron dos tercios de los créditos y lo obtuvo sin asistir a clase, presentando cuatro trabajos.

Prácticamente al mismo tiempo surgieron las acusaciones al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, por presuntamente haber plagiado parte de su tesis doctoral, un caso que Vox intentó llevar a los tribunales y que el Supremo rechazó al no ver infracción penal.

El currículum de su mujer, Begoña Gómez, ha sido objeto asimismo de las críticas del PP, al codirigir un máster en la Universidad Complutense sin contar con una licenciatura.

Otras dimisiones

La dimisión de Montón, que defendió siempre que no había cometido ninguna irregularidad y en 2020 fue nombrada embajadora ante la Organización de Estados Americanos (OEA), fue un gesto poco habitual en la política española.

En Alemania, donde son habituales los rastreos de plagio, la canciller Angela Merkel llegó a perder a tres ministros tras las acusaciones de haber copiado en sus respectivas tesis doctorales: el titular de Defensa Karl-Theodor zu Guttenberg, la responsable de Educación y Annette Schavan y la ministra de Familia Franziska Giffey, ésta de las filas socialdemócratas.

El año pasado también dimitió la ministra de Sanidad noruega Ingvild Kjerkol después de que una comisión universitaria anulara su trabajo de posgrado por considerar que era un plagio.

Un caso sonado fue del economista brasileño Carlos Alberto Decotelli, que renunció al cargo de ministro de Educación de Brasil en el Gobierno de Jair Bolsonaro poco después de ser nombrado, tras destaparse múltiples falsedades en su currículum.

Se presentaba con una maestría en la Fundación Getulio Vargas (FGV), un doctorado de la Universidad de Rosario (Argentina) y un postdoctorado en la universidad de Wuppertal (Alemania).

Pero las universidades argentinas y alemanas informaron de que no tenía título alguno con su sello, aunque había cursado distintas materias, y la Fundación, reconocido centro de estudios económicos y políticos de Brasil, señaló que había abierto una investigación sobre la tesis de maestría por presunto plagio.