Gustavo Monge
Praga, 3 jul (EFE).- Arqueólogos checos han presentado este jueves el hallazgo de un importante asentamiento celta sin fortificaciones, de unas 25 hectáreas, y cuyo apogeo tuvo lugar en el siglo II a. C., un descubrimiento «sin parangón» en el país por el número y la riqueza de objetos encontrados.
«No tiene parangón en la República Checa y abre posibilidades de investigación insospechadas», asegura a EFE Ladislav Rytíř, jefe del Centro de Arqueología de Campo de la Universidad de Hradec Králové, la institución donde se ha presentado el hallazgo y que, junto al Museo de Bohemia Oriental de esa ciudad, dirige los trabajos.
«El potencial de información de la superficie original del asentamiento en los horizontes superficiales y subterráneos supera con creces el estándar, superando los rellenos de objetos arqueológicos bajo la capa superficial», explica Rytíř.
Decenas de miles de objetos
Ya se han extraído 22.000 bolsas de hallazgos, lo que lo convierte en una de las mayores colecciones de artefactos jamás encontradas en Bohemia, y entre los que se encuentran objetos cotidianos y una colección de joyas excepcionalmente rica.
Aunque el hallazgo no ha sido hecho público hasta hoy, se produjo el año pasado durante las obras de construcción de una autopista entre las ciudades de Úlibice y Hradec Králové, en el noreste del país.
El yacimiento ha sido datado en el período denominado La Tène, también conocido como la segunda Edad del Hierro, una etapa de la prehistoria europea que se extiende aproximadamente desde el 450 a.C.
En concreto, este yacimiento, que se extiende sobre 22 hectáreas, tuvo su apogeo en el siglo II antes de nuestra era.
Los expertos mantienen que fue un centro comercial y manufacturero suprarregional, conectado a rutas comerciales de larga distancia, como lo evidencian los hallazgos de ámbar, monedas de oro y plata y evidencia la producción de cerámica de lujo.
«Podría haber formado parte de la ruta del ámbar, que unía la región báltica con el mar Adriático», añade Matous Holas, jefe del proyecto por parte del Museo de Bohemia Orienta.
Holas recuerda que «hay otro asentamiento similar en Němčice nad Hanou», también sin fortificar y de tipo proto-oppida, que existió aproximadamente entre los siglos III y I a. C.
Los oppida fueron grandes asentamientos fortificados con funciones centralizadoras que aparecieron en la región posteriormente.
Este nuevo asentamiento se enmarca en una cadena de hallazgos en toda esta región centroeuropea, de la que forman parte centros celtas hallados en el sur de Alemania y en las márgenes del río Danubio, precisó Rytíř.
Oro, cerámica y santuarios
Además de las joyas, se han encontrado objetos metálicos, entre ellos monedas celtas de oro y plata, cuños, fragmentos de vasijas de cerámica, cimientos de viviendas, instalaciones de producción y lo que se creen eran uno o dos santuarios.
Al igual que el asentamiento de Němčice, conocido por albergar la mayor colección de monedas celtas de Europa Central y un taller de procesamiento de ámbar, el nuevo hallazgo de Bohemia oriental ha sorprendido a los arqueólogos por la abundancia de objetos y utensilios, que no fueron dañados por la agricultura ni saqueados por la actividad ilegal de los buscadores de tesoros.
Ahora los arqueólogos están considerando presentar una propuesta para declarar el sitio, que se encuentra bajo vigilancia constante, como monumento cultural.
