Bilbao, 17 sep (EFE).- Un nuevo yacimiento prehistórico ha sido descubierto en Bizkaia con pinturas rupestres que podrían datar de la Prehistoria reciente (entre 5000 y 1000 a. C.) dentro de una cueva artificial denominada hipogeo, en lo que constituye el primer hallazgo de este tipo en la zona cantábrica.

El Museo Arqueológico de Bilbao ha acogido este miércoles la presentación de este descubrimiento, así como de otro hallazgo, el de un nuevo conjunto de grabados rupestres de animales, con una edad aproximada entre 19.000 y 16.000 años, en la cueva de Armintxe, en Lekeitio (Bizkaia).
Se trata de «una nueva ventana al pasado», según ha dicho la diputada foral vizcaína de Cultura, Leixuri Arrizabalaga, en la presentación, que ha contado con la participación de los arqueólogos implicados en los hallazgos.
El arqueólogo Juan Carlos Quintana ha relatado que el yacimiento prehistórico de Erlapiku, en Gamiz-Fika, que contiene imágenes humanas esquemáticas con dos tonos de pigmento en rojo y negro, fue descubierto de manera inesperada el 26 de junio pasado cuando se llevaba a cabo un proyecto de intervención para recuperar el entorno de la ermita de San Pedro de Atxispe.
El yacimiento es considerado el primer hipogeo -o cueva artificial-mixto documentado de la zona cantábrica.
Su interior excavado, al que se accede por una serie de escalones tallados en roca y por una puerta tallada cuadrangular, acoge en un espacio de 5 por 2 por 1,75 metros, cinco paneles con pinturas y un mínimo de 25 representaciones realizadas con dos tonos de pigmentos naturales rojo y negro. Las pinturas representan figuras humanas esquemáticas.
La verificación del yacimiento ha sido realizada por dos investigadores independientes especialistas y referentes en arte rupestre: Diego Garate, de la Universidad de Cantabria, y Primitiva Bueno, de la Universidad de Alcalá de Henares.
Los investigadores continúan el estudio de las pinturas descubiertas, que sitúan en un momento aún por precisar de la Prehistoria reciente por la técnica de pintura utilizada (pigmentos naturales diluidos en agua y aplicados con los dedos) y por la iconografía de las representaciones.
La superposición de figuras podría indicar que la cueva fue pintada en distintos momentos.
El arqueólogo Juan Carlos Quintana ha contado que comparte el descubrimiento con el vecino de Gamiz-Fika Juan Carlos Izagirre, quien dio el aviso de que en un excursión había encontrado en la zona «como dos abrigos que en un primer momento pensamos que podían ser refugios de la Guerra Civil. Quedé con un él un día, subimos hasta Erlapiku» y al «meter la cabeza (…), ya vimos figuras en rojo y nos llevamos un vuelco».
Según el experto, lo hallado constituye «una grandísima novedad» en Bizkaia porque «no hay nada de arte rupestre sobre una cueva que no es natural al cien por cien» y, asimismo, «el conjunto rupestre es muy novedoso en la Prehistoria, no solo de Bizkaia, sino del Cantábrico Oriental. Ha sido una verdadera sorpresa», ha valorado.
En el mismo acto informativo, el arqueólogo Iñaki Intxaurbe (Universidad de Burdeos) ha explicado que también se han encontrado nuevas pinturas rupestres en la cueva de Armintxe de Lekeitio.
Este yacimiento con arte rupestre paleolítico fue descubierto por la Asociación espeleológica ADES en 2016 y desde 2024 un equipo liderado por Intxaurbe desarrolla una investigación subvencionada por la Diputación vizcaína y el Ayuntamiento de Lekeitio para lograr una reconstrucción tridimensional de la cueva.
En el marco de estos trabajos se han encontrado los grabados de una cabra en posición ascendente, un bisonte de gran tamaño y otras dos figuras de animales de tamaño reducido.
Son figuras grabadas con los dedos o con un instrumento romo en la capa arcillosa que se forma sobre la pared caliza y tienen una edad aproximada entre 19 y 16.000 años.