Badajoz, 10 mar (EFE).- Una auxiliar técnico educativa ha sido asesinada por tres menores residentes en una vivienda de cumplimiento de medidas judiciales de Badajoz, un suceso que ha sido condenado por trabajadores de este sector y sindicatos, que han denunciado carencias de seguridad en este tipo de pisos y centros de atención a menores.

La auxiliar técnico educativa (ATE), de 35 años y natural de Castuera (Badajoz), fue agredida mortalmente esta pasada noche en la citada vivienda por tres adolescentes residentes, dos chicos de 14 y 15 años y una joven de 17, quienes ya han sido detenidos.

Según las primeras pesquisas, la educadora pudo ser asfixiada con un cinturón. Tras la agresión mortal, los tres menores cogieron las llaves del coche de la víctima y condujeron en dirección a Mérida. Sin embargo, tuvieron un accidente de tráfico a la altura del municipio pacense de Lobón, a unos 30 kilómetros de la capital extremeña.
En el lugar del accidente fue detenida la joven mientras que los dos chicos fueron localizados en Mérida, ha informado el delegado del Gobierno en Extremadura, José Luis Quintana.
En la vivienda, donde residían tres chicos de entre 14 y 17 años y una joven de 17 años, trabajan cinco auxiliares técnicos educativas, entre ellas la ahora fallecida, un coordinador y otro profesional, todos ellos con turnos rotatorios, ha explicado a EFE una de las trabajadoras, que ha omitido dar su identidad por “miedo”.
“Se vivía una situación muy difícil desde hace quince días, con algunos robos y fugas”, ha añadido esta auxiliar, quien ha apuntado que “esta tragedia le podría haber ocurrido a cualquiera”.
En una concentración de profesionales de este sector y de representantes sindicales celebrada este mediodía en Badajoz para condenar esta muerte violenta, la educadora Sheila Gómez, que ha ejercido de portavoz, ha afirmado que la auxiliar ahora fallecida había denunciado días atrás a uno de los menores por supuestas amenazas en dicho inmueble, que no cuenta con cámaras ni personal de seguridad.
“Los menores son cada vez más agresivos, por lo que son necesarias más medidas. A quienes cometen estos hechos les sale muy barato matar”, ha afirmado Gómez, cuya denuncia ha sido respaldada de forma unánime por los sindicatos.
En este marco, UGT, CCOO, USO y CSIF han exigido tanto a la Junta de Extremadura como a las empresas adjudicatarias de estos servicios de acompañamiento a menores que “tomen las medidas necesarias para salvaguardar la seguridad de los trabajadores, así a los propios menores”.
En la concentración, donde se han podido leer pancartas con lemas como ‘En casa nos esperan’ o ‘Trabajar no puede costarnos la vida’, se ha evidenciado el tenso clima en el que trabajan estos empleados, ya que menores residentes en el centro ‘Marcelo Nessi’, ante cuyas puertas se ha celebrado la concentración, han proferido insultos a los asistentes.
La secretaria general del Colegio de Educadores Sociales de Extremadura (Copesex), Inés María Solomando, ha afirmado que en las viviendas donde hay menores cumpliendo medidas judiciales, como la de Badajoz, debería haber “vigilantes de seguridad, pero no los hay; solamente hay educadores sociales y cuidadores”.
Los jóvenes residen en este tipo de viviendas por orden del juez de menores, algunos de ellos con medidas definitivas y otros con medidas cautelares, “como algo temporal hasta que se celebre el juicio y haya una medida definitiva”, ha explicado.
La presidenta de la Junta de Extremadura, María Guardiola, ha trasladado sus condolencias a toda la familia y a los compañeros de la educadora. “Es un hecho terrible y dramático”, ha agregado.