Light
Dark
 

Díaz Yanes aborda su filme sobre ETA con «respeto para no meter la pata en lo esencial»

El director y guionista Agustín Díaz Yanes (3i) y los actores Andrés Gertrudix (3d), Ariadna Gil (d), Raúl Arévalo (i), Iraia Elias (2d), y Susana Abaitua (2i), posan este miércoles durante la presentación de la película "Un fantasma en la batalla", que compite en la sección oficial del 73 Festival Internacional de Cine de San Sebastián. EFE/ Javier Etxezarreta

San Sebastián, 24 sep (EFE).- La ETA que socializó el sufrimiento, la que mató a Miguel Ángel Blanco y secuestró a Ortega Lara es la que ha elegido Agustín Díaz Yanes para ‘Un fantasma en la batalla’, película que sigue a una agente infiltrada en la banda durante 12 años y que ha abordado con el «mayor respeto para no meter la pata en cuestiones esenciales».

El director y guionista Agustín Díaz Yanes posa este miércoles durante la presentación de la película "Un fantasma en la batalla", que compite en la sección oficial del 73 Festival Internacional de Cine de San Sebastián. EFE/ Javier Etxezarreta

El filme, que se estrena el 3 de octubre en salas y llegará a Netflix dos semanas después, se ha presentado este miércoles en la Sección Oficial del Festival de San Sebastián fuera de concurso con la asistencia de los actores protagonistas: Susana Abaitua, Andrés Gertrúdix, Iraia Elias, Raúl Arévalo y Ariadna Gil.

Díaz Yanes condensa en la joven infiltrada que investiga sobre la red de zulos de ETA en el sur de Francia la labor que agentes de la Guardia Civil desarrollaron clandestinamente en las filas de la organización y que desembocó en la operación Santuario, uno de los mayores hitos de la lucha contra la banda terrorista.

Se saldó con la incautación de un importantísimo arsenal y la detención de 24 personas, entre ellos el entonces máximo jefe de ETA, Mikel Albisu, conocido como Mikel ‘Antza’ y su pareja sentimental, Marisol Iparragirre, ‘Anboto’.

Ariadna Gil es la ‘Anboto’ de ‘Un fantasma en la batalla’, parte del triángulo femenino que tiene a Susana Abaitua como la guardia infiltrada y a Iraia Elias como la miembro de ETA de la que la agente se sirve para introducirse en la organización.

«Amaia, el personaje de Susana es una creación bastante libre mía, el de Iraria también lo inventé, pero con cosas de militantes clandestinas que conocía, y el de Ariadna es bastante real», ha explicado en rueda de prensa Díaz Yanes, que con el teniente coronel de pasado oscuro que interpreta Andrés Gertrúdix ha trazado una mezcla de realidad y ficción.

Un año separa esta infiltrada, protagonizada por Susana Abaitua, de la interpretada por Carolina Yuste en el filme de Arantxa Etxebarria. Las similitudes son inevitables no solo por la historia que aborda, sino porque hay una coincidencia de espacio temporal en la primera parte del filme.

«Los que hicieron ‘La infiltrada’ son todos amigos, los actores, la directora. Es una gran película, así lo ha pensado el público y ahí están todos los premios. Ahora nos toca a nosotros», ha destacado el cineasta madrileño, al que le gustan los filmes irlandeses sobre el IRA y las películas de espías, y que siempre había querido hacer un largometraje sobre ETA.

‘Un fantasma en la batalla’ se inicia con el asesinato del PP de San Sebastián, Gregorio Ordóñez, para recordar otros muchos crímenes de la banda con imágenes reales, unos cometidos antes y otros después de la tregua de 1998, rota en el año 2000, que Díaz Yanes elude en su historia.

«La tregua estaba en el guión y está rodada, pero paraba mucho la película y salió del montaje. Había que explicar mucho además y no tenía impacto en los personajes», ha comentado.

El realizador madrileño ha tratado su película pensando en que, al distribuirla Netflix, debía entenderse fuera de España.

Este miércoles, también han acompañado al director Belén Atienza y Sandra Hermida, pero no así el orto productor del filme, J.A. Bayona, ya que está ejerciendo de presidente del jurado de la Sección Oficial.

Tanto las productoras como el realizador han agradecido a la conocida plataforma el apoyo a este proyecto, que ha permitido, por ejemplo, contar con la «carísima» música italiana que es un elemento fundamental de la historia y lleva hacia arriba su final.

Todos los actores han afrontado su trabajo como un reto. Susana Abaitua «desde la igualdad real» sin pensar en el sexo de su personaje. Iraia Elias, intentado «no crear una caricatura» y Ariadna Gil, «de una forma natural, sin subrayados», como entiende que son los personajes de Díaz Yanes.

«Se han hecho y se van a seguir haciendo muchas películas sobre ETA», ha manifestado el director. Daniel Arévalo cree que es necesario quitarse el «estigma» para seguir contado este tipo de historias, «porque contar bien las historias, sana».