La Paz, 12 ago (EFE).- El candidato y empresario opositor Samuel Doria Medina prometió este martes que, si gana las elecciones del domingo en Bolivia, colocará una cuenta regresiva en la fachada del Palacio de Gobierno en La Paz con los cien días en los que asegura retornará los dólares y los combustibles a la economía y frenará la inflación.

Doria Medina hizo esta oferta junto a centenares de sus seguidores con los que caminó desde la populosa zona comercial de la Garita de Lima en La Paz, pasando por el centro histórico de la ciudad, hasta la avenida Arce en el barrio residencial de Sopocachi, en el que fue uno de sus últimos actos proselitistas antes del silencio electoral.

El candidato de la alianza Unidad apeló a su experiencia como empresario para asegurar que actúa «de manera diferente» a los políticos, pues trabaja con «plazos», «metas» y junto a «la mejor gente para resolver un problema».
«El 8 de noviembre voy a poner un cartel grande en la fachada del Palacio de Gobierno que va a decir 100 y el 9 va a decir 99, y el 10 va a decir 98, para que vean que en 100 días van a volver los dólares, va a haber gasolina, va a haber diésel y vamos a parar la inflación que tanto está perjudicando a las familias», prometió el candidato opositor.
El empresario, que confía en ganar las elecciones, también se mostró seguro de que cumplirá su propuesta en esos cien días desde el 8 de noviembre, cuando debe jurar el nuevo Gobierno, hasta el 15 de febrero de 2026.
Doria Medina también aseguró que una vez lograda esa meta, empezará a trabajar «para que la nueva locomotora de la economía boliviana sean los emprendedores, hombres y mujeres que tienen una idea» y a quienes ayudará a transformarla en «un proyecto, después una pequeña empresa, una empresa mediana y después una gran empresa».
«Nuestra meta es impulsar un millón de nuevos emprendimientos en los próximos cinco años. De ese millón de emprendedores, cerca de 700.000 van a ser mujeres», prometió el actual líder de las encuestas antes de los comicios.
Doria ratificó que cerrará las empresas públicas «que sólo generan pérdidas» e instó a los ciudadanos a que «no silencien su voto» marcando blanco o nulo, sino que «hagan que su voto elija el futuro para todos los bolivianos».
Este domingo, los bolivianos elegirán a su presidente, vicepresidente y parlamentarios de la Asamblea Legislativa para el siguiente quinquenio.
Las encuestas auguran una posible segunda vuelta entre Doria Medina y el expresidente Jorge Tuto Quiroga (2001-2002), también opositor, si bien también reflejan porcentajes altos de indecisos y votos nulos y blancos.
La etapa preelectoral ha estado marcada por las tensiones y protestas de los sectores afines al expresidente Evo Morales (2006-2019), quien ha insistido en ser candidato pese a una disposición constitucional que le impide volver a postular porque ya gobernó el país en tres ocasiones.
Como las protestas de sus seguidores no lograron forzar su inscripción, ahora Morales y los grupos que le son leales promueven el voto nulo.