Oviedo, 9 jun (EFE).- Duro Felguera afronta una semana decisiva para su futuro ante la finalización, el próximo miércoles, de la prórroga del preconcurso de acreedores al que se acogió para tratar de solventar sus dificultades financieras.
El grupo de ingeniería y bienes de equipo solicitó el preconcurso el 11 de diciembre de 2024 con el fin de aprobar un plan de reestructuración para garantizar su «viabilidad futura y la conservación del mayor número de puestos de trabajo posible», y también para buscar una solución a los litigios que le afectaban, especialmente el relacionado con un proyecto en Argelia.
La compañía solicitó posteriormente una prórroga, que el Juzgado de lo Mercantil número 3 de Gijón le concedió el pasado 12 de marzo por un plazo adicional de tres meses, con el objetivo de continuar las conversaciones con los acreedores.
El juzgado autorizó la prórroga al contar la empresa con la conformidad del 96,5 % de los acreedores financieros que podrían resultar afectados por la reestructuración.
Dudas en torno a una nueva prórroga
Ante la posibilidad de que la empresa opte por solicitar una segunda prórroga, fuentes jurídicas consultadas por EFE subrayan que la Ley Concursal solo prevé la posibilidad de una.
A este respecto, apuntan que el artículo 607.1 de la Ley Concursal establece que el deudor o los acreedores podrán solicitar al juez la concesión de una prórroga «por un periodo de hasta otros tres meses».
Sin embargo, otras fuentes jurídicas y también cercanas a la compañía inciden en que dicho artículo no establece expresamente una prohibición de una prórroga adicional, como sí hace para las pymes el 683 al señalar que «solo podrán prorrogarse por una sola vez».
De hecho, añaden estas últimas fuentes, son ya varios los juzgados que en los últimos meses han hecho una interpretación favorable hacia las empresas en preconcurso y han concedido una segunda prórroga.
Últimas novedades
Sólo un mes después de la prórroga del preconcurso, Duro Felguera y Sonelgaz Production d’Electricité (SPE) firmaron un memorándum de entendimiento para la solución amistosa del litigio millonario que mantenían por la suspensión del proyecto de la central térmica de ciclo combinado de Djelfa, en Argelia, por el que la empresa argelina reclamaba 413 millones de euros, un acuerdo que, no obstante, aún está pendiente de concreción.
Además, tras la prórroga del concurso de acreedores Indra también dio a conocer su intención de comprar a Duro Felguera una factoría en Gijón, conocida como ‘El Tallerón’, para destinarla a la construcción de vehículos militares y, recientemente, le hizo llegar una oferta vinculante.
El grupo de ingeniería y bienes de equipo también mantiene conversaciones con la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), que dispone de dos de los nueve puestos del consejo de administración de Duro Felguera tras el rescate público de 120 millones de euros del que fue objeto la empresa en el año 2021.
La compañía, controlada desde febrero de 2024 por los grupos mexicanos Prodi y Mota-Engil, cuenta con una plantilla cercana a los 1.500 trabajadores.
El consejero de Ciencia, Industria y Empleo, Borja Sánchez, ha informado este mismo lunes de que el Gobierno del Principado ha solicitado a la SEPI «la continuidad en su cooperación» para la viabilidad de la compañía.
