Cannes (Francia), 20 may (EFE).- Un famoso actor egipcio al que las autoridades presionan y amenazan para que interprete al presidente de Egipto, Abdelfatah al Sisi. Esa es la premisa de ‘Eagles of the Republic’, el filme con el que Tarik Saleh compite por la Palma de Oro de Cannes y que es, hasta ahora, el filme más comercial de esta edición.

El realizador sueco de origen egipcio cierra con esta película su trilogía del Cairo, tras ‘El Cairo confidencial’ (2017) y ‘Conspiración en Cairo’ (2022), las tres protagonizadas por el sueco-libanés Fares Fares.

Un largometraje que no es puro entretenimiento, porque a través de una historia muy bien hilada, traza un ácido retrato del poder del Ejército en el país.
“Es un thriller, como era ‘El Cairo confidencial’, que plantea una cuestión existencia y fundamental: ¿Debo inclinarme frente al sistema?”, en palabras del realizador.
La industria del cine “tiene una relación complicada con el poder” y “tenemos que tener cuidado con nuestra visión respecto a él”, explicó Saleh en una rueda de prensa.
“En Egipto, un tercio de la economía está gestionada por el Ejército y por eso hay que ser aún más prudentes” cuando se tocan temas relacionados con los militares, precisó.
Más aún cuando actualmente el cine en Egipto “está controlada por una única compañía, United, propiedad del Ejército”, señaló el realizador que se lamentó de esta situación en un país que llegó a ser una potencia cinematográfica y el tercer mayor productor de películas del mundo.
Con ‘Eagles of the Republic’ completa una trilogía en la que ha analizado la corrupción en Egipto y el control que sufre la sociedad, que se cierra de forma espectacular con este filme protagonizado de nuevo por Fares Fares.
“Hablamos mucho sobre el guion, la mayor parte del trabajo se hace antes de comenzar el rodaje, hablando de los personajes, no solo del mío, todo se prepara antes y así cuando empezamos el rodaje ya sabemos lo que queremos y vamos juntos a conseguir esa visión”, precisó el actor.
En el filme hace del ‘faraón de la pantalla’, el actor más famoso de Egipto, que en un primer momento es descrito como alguien vanidoso que solo se interesa por tener una novia joven, pero poco a poco se va descubriendo que no es así.
“Es un personaje increíble, con muchas capas. El desafío era hacer que fuera creíble en todo el arco que tiene, que es muy interesante”, precisó Fares Fares.