Ecuador recibe 6 millones de dólares para mejorar control de reservas marinas de Galápagos

Fotografía de archivo que muestra una de las playas de Puerto Villamil, en la isla Isabela, la más grande del archipiélago de las Islas Galápagos (Ecuador). EFE/Fernando Gimeno

Guayaquil (Ecuador), 15 may (EFE).- El Galápagos Life Fund (GLF), la entidad creada para administrar los fondos del canje de deuda que el Gobierno de Ecuador hizo en 2022 para la conservación de las Islas Galápagos, destinó seis millones de dólares para mejorar la vigilancia de las reservas marinas que existen en torno al archipiélago ecuatoriano.

Los seis millones de dólares recayeron en un proyecto para fortalecer el control y la vigilancia en la Reserva Marina de Galápagos, de 130.000 kilómetros cuadrados de extensión; y en la Reserva Hermandad, de 60.000 kilómetros cuadrados, que conecta con la costarricense isla Cocos para preservar un corredor migratorio de especies marinas.

Las entidades encargadas de implementar el proyecto serán la Dirección del Parque Nacional Galápagos, la Armada del Ecuador y Subsecretaría de Recursos Pesqueros.

Así, la subvención permitirá avanzar en la implementación efectiva del plan de manejo de la Reserva Marina Hermandad, aprobado por el Ministerio de Ambiente, Agua y Transición Ecológica en 2023, lo que incluye actividades clave como monitoreo y vigilancia, según informó este jueves la GLF en un comunicado.

La organización, que nació para brindar apoyo a iniciativas de conservación marina, aseguró que esta subvención es un reflejo del “compromiso de la GLF con la conservación de los ecosistemas marinos y su biodiversidad” y que busca apoyar “acciones coordinadas entre instituciones para la protección de uno de los ecosistemas marinos más importantes del planeta”.

La directora ejecutiva del GLF, Mónica Calvopiña, dijo que con estos recursos se busca que haya una flota operativa para patrullajes eficientes, un sistema interinstitucional de monitoreo remoto con 100 % de cobertura en la Reserva Hermandad, y la consolidación de un grupo especializado en control y vigilancia para garantizar la conservación efectiva de la misma.

Por su parte, la ministra de Ambiente, Agua y Transición Ecológica, María Cristina Recalde, aseguró que este es “el primer mecanismo financiero permanente diseñado para asegurar la disponibilidad de fondos a largo plazo y garantizar la sostenibilidad del trabajo conjunto entre el Parque Nacional Galápagos, la Armada del Ecuador y la Subsecretaría de Recursos Pesqueros”.

Esta subvención se suma a los más de 785.000 dólares que Galápagos Life Fund entregó la semana pasada a proyectos que se dedicarán a impulsar la conservación marina en el archipiélago ecuatoriano, declarado en 1978 por la Unesco como Patrimonio Natural de la Humanidad.

Estas iniciativas participaron en una convocatoria que se abrió en diciembre pasado para subvenciones pequeñas, medianas y grandes para personas naturales y organizaciones privadas, por un total de 3,5 millones de dólares para temas de pesca sostenible y educación ambiental.

Esa fue la primera partida de un total de 323 millones de dólares que se comprometieron para la conservación de las Islas Galápagos tras el canje de deuda ejecutado en 2023, que pueden llegar hasta unos 460 millones de dólares gracias a un fideicomiso donde irán parte de los fondos.

La conversión de deuda implicó 1.628 millones de dólares en bonos soberanos de Ecuador que acabaron recomprados en 2023 por 656 millones de dólares, en una operación en conjunto con el Gobierno ecuatoriano, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Credit Suisse y las organizaciones ambientalistas Ocean Finance Company (OFC) y Pew Bertarelli Ocean Legacy.

Con los nuevos bonos, se destinarán aproximadamente 17 millones de dólares anuales para Galápagos por 18,5 años, de los que alrededor de 12 millones irán a proyectos de conservación y 5 millones a capitalizar un fondo fiduciario.

El archipiélago de Galápagos, formado por trece islas, se encuentran a unos mil kilómetros al oeste de las costas continentales de Ecuador.

Por su alta biodiversidad, las Galápagos están consideradas como un laboratorio natural que inspiró al científico británico Charles Darwin a desarrollar en el siglo XIX su teoría de la evolución y selección natural de las especies.