Mérida, 16 may (EFE).- La defensa de David Sánchez, hermano del presidente del Gobierno, ha pedido el sobreseimiento de la causa en la que está investigado al considerar que el proceso ha tenido “carácter político, instrumental y teleológico”.
Emilio Cortés, abogado de Sánchez, ha presentado un recurso de reforma y subsidiario de apelación contra el auto de acomodación de la causa por prevaricación admnistrativa y tráfico de influencias, los dos delitos que figuran en el escrito de procesamiento dictado por la jueza instructora, Beatriz Biedma.
En su escrito, al que ha tenido acceso EFE, el abogado considera que no existen indicios criminales contra su representado y señala que en el proceso “se han impuesto de una manera absolutamente inasumible los intereses de las acusaciones populares”.
El letrado, que a lo largo de su exposición se muestra crítico con la magistrada, no comparte que de todas las horas empleadas en la instrucción se seleccionara en el auto de procesamiento “todo aquello que se estima perjudicial para los investigados”, con una ausencia “del preceptivo balance indiciario que obliga a los Juzgados de Instrucción a valorar todo, y no parte, de lo actuado”.
“Del extraordinario caudal de indicios de descargo nada se dice: absolutamente nada”, expone el abogado de David Sánchez.
Además, resalta que la jueza en su exposición utilice expresiones como “seguramente” o “apariencia de legalidad”. “No puede haber un punto de partida indiciario más flojo, ni más débil ni más voluble que el que se enuncia con el uso del ‘seguramente’ que, por razones léxicas ineludibles, es refractario a lo que integra el concepto de indicio de criminalidad”.
A su juicio, el auto no concreta “en qué estribaría la autoría de David Sánchez ni con qué título de imputación”. “Sostener negro sobre blanco, como suele decirse”, que David Sánchez habría podido ser quien orquestó lo que se relata en la causa -convocatoria, proceso y adjudicación del puesto de trabajo en la Diputación- es, según Cortés, un hecho incompatible con la instrucción y meramente inferido.
En su recurso, el letrado asevera que un indicio no es que una candidata al puesto de trabajo ponga de manifiesto “que le habían comentado que la plaza a la que ella concursaba se la iba a adjudicar nuestro representado”, ni tampoco que un candidato a una plaza en una ciudad que no es la suya -en referencia a David Sánchez- se interese por el precio de un apartamento.
“Un indicio no es que un director de conservatorio manifieste que ha escuchado ‘rumores’ de que se le va a adjudicar la plaza a un candidato cuando, además, declara bajo juramento de decir verdad que era un rumor más de los que había”, continúa en esta línea Cortés.
Asimismo, el letrado lamenta en su escrito que la jueza instructora no reaccionó ni investigó el hecho de que se difundiera el vídeo y el audio de la declaración de David Sánchez en sede judicial, pues supuso un acto de revelación procesal.
“La buena fe y cortesía procesal” no ha sido respetada por las otras partes presentes en el proceso.
La petición de archivo de la causa por parte de la defensa de David Sánchez coincide con la de la Fiscalía, que ya elevó esta misma solicitud al entender que no existen “indicios racionales de criminalidad”.
Por contra, la acusación popular agrupada, bajo la dirección letrada de Manos Limpias, ha pedido la apertura de juicio oral y solicita tres años de prisión tanto para Sánchez como para el presidente de la Diputación de Badajoz, Miguel Ángel Gallardo.