Bangkok, 30 abr (EFE).- La tregua declarada por la junta militar de Birmania (Myanmar) en el conflicto que mantiene con guerrillas étnicas y prodemocráticas para facilitar la ayuda humanitaria tras el terremoto sucedido hace un mes expira este miércoles, si bien la oposición acusa al Ejército de haber violado cientos de veces.

El alto el fuego, anunciado el pasado 2 de abril en principio hasta el día 22, y que el Ejército birmano extendió hasta hoy la semana pasada, expira este miércoles, sin que de momento el régimen castrense se haya pronunciado sobre otra posible ampliación.

El primer ministro de Malasia, Anwar Ibrahim, volvió a pedir este martes a las partes en conflicto en Birmania (Myanmar) extender el cese al fuego para asistir a los afectados por el terremoto de magnitud 7,7 del 28 de marzo, que dejó más de 3.700 fallecidos, a decenas de miles sin hogar y cerca de 200.000 desplazados.
Anwar se reunió en Bangkok a mediados de abril con el jefe de la junta, Min Aung Hlaing, para pedirle que ampliara la tregua, en un acercamiento inusual entre un mandatario del Sudeste Asiático y el jefe golpista, apartado de las citas importantes desde el golpe de Estado de 2021.
Varias guerrillas étnicas y la oposición prodemocracia acusan a la junta de haber perpetrado centenares de ataques pese al alto el fuego.
El Gobierno de Unidad Nacional (NUG), formado en parte por diputados depuestos por los militares tras el golpe, afirma que los ataques del Ejército mataron a 72 civiles solo en la primera semana tras la tregua, incluyendo ataques en la región de Mandalay, muy impactad por el sismo.
La Unión Nacional Karen (KNU) indicó el domingo que los militares han llevado a cabo al menos 110 ataques en zonas bajo su control, al este del país, desde la tregua.
En el occidental estado de Rakáin, uno de los puntos calientes del conflicto, los soldados han emprendido más de 400 ataques, según la Oficina para la Cooperación Humanitaria de la Liga Nacional Arakan, opuesta a la junta.
El golpe puso fin a una década de transición democrática y agudizó la guerra de guerrillas que vive el país desde hace décadas. Amnistía Internacional (AI) dijo este martes que el conflicto escaló en Birmania en el último año y que el Ejército emprende una ofensiva “indiscriminada, desproporcionada y mortífera” contra los rebeldes. EFE
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