El arancel del 20 % de EE.UU. a Taiwán corona la peor semana de Lai como líder de la isla

El presidente de Taiwán, William Lai, durante una rueda de prensa este viernes 1 de agosto en Taipéi, tras la decisión de EE. UU. de imponer aranceles del 20 % a los productos taiwaneses. EFE/ Oficina Presidencial de Taiwán / Wang Yu Ching // SOLO USO EDITORIAL/SOLO DISPONIBLE PARA ILUSTRAR LA NOTICIA QUE ACOMPAÑA (CRÉDITO OBLIGATORIO)

Taipéi, 1 ago (EFE).- La imposición de aranceles del 20 % sobre los productos taiwaneses por parte de Estados Unidos ha supuesto un duro golpe para el presidente de Taiwán, William Lai, que atraviesa el momento más delicado de su mandato tras encadenar varios reveses políticos de magnitud en los últimos días.

El mandatario estadounidense, Donald Trump, firmó este jueves una orden ejecutiva con sus nuevos gravámenes para 69 socios comerciales, entre ellos Taiwán, cuyas exportaciones al país norteamericano estarán gravadas con una tasa del 20 % desde el 7 de agosto.

Ese porcentaje es superior al aplicado por Estados Unidos a los bienes importados desde Corea del Sur (15 %), Japón (15 %) o Filipinas (19 %), lo que supone un duro golpe para el Ejecutivo taiwanés, que desde el inicio del proceso negociador mostró una postura conciliadora con Washington.

«Aunque hasta ahora las negociaciones han producido avances parciales, como la reducción del arancel del 32 al 20 %, cabe señalar que el 20 % nunca fue el objetivo de Taiwán», reconoció este viernes Lai, quien se comprometió a seguir negociando con Estados Unidos para lograr unos aranceles «más razonables».

Veto a la escala en Estados Unidos

El presidente de Taiwán, William Lai (c), durante una rueda de prensa este viernes 1 de agosto en Taipéi, tras la decisión de EE. UU. de imponer aranceles del 20 % a los productos taiwaneses. EFE/ Oficina Presidencial de Taiwán / Wang Yu Ching // SOLO USO EDITORIAL/SOLO DISPONIBLE PARA ILUSTRAR LA NOTICIA QUE ACOMPAÑA (CRÉDITO OBLIGATORIO)

El mayor varapalo para el líder taiwanés llegó el lunes, cuando el Financial Times (FT) reveló que la Casa Blanca había vetado la escala que Lai tenía previsto hacer en Nueva York a principios de agosto, en el marco de un viaje por Paraguay, Belice y Guatemala, tres de los doce aliados diplomáticos que conserva Taipéi.

Según fuentes citadas por este medio, Trump temía que el paso de Lai por la ciudad afectara las conversaciones comerciales en curso entre Estados Unidos y China, cuyas autoridades se oponen a cualquier tipo de contacto entre funcionarios taiwaneses y estadounidenses.

En un intento de restar gravedad a la situación, el portavoz de la Cancillería taiwanesa, Hsiao Kuang-wei, manifestó el martes que Lai no tenía intención de viajar al extranjero en este momento, debido al impacto del tifón Danas en el sur de la isla y a las negociaciones arancelarias con Washington.

Esas afirmaciones contradicen lo dicho por el presidente de Paraguay, Santiago Peña, quien anunció que Lai visitaría su país en agosto, así como las informaciones de varios medios internacionales, entre ellos Bloomberg, que revelaron que el mandatario haría escala en Nueva York el 4 de agosto y en Dallas (Texas) el día 14.

Por si esto fuera poco, el FT publicó este miércoles que EE. UU. canceló una reunión en Washington entre el ministro taiwanés de Defensa, Wellington Koo, y el número 3 del Pentágono, Elbridge Colby, lo que ha alimentado en Taipéi los temores de que Trump esté adoptando una postura más cautelosa respecto a su apoyo a la isla.

Fracaso del «referéndum revocatorio»

En el ámbito interno, Lai también ha visto fracasar los esfuerzos para destituir a 24 legisladores del opositor Kuomintang (KMT), una formación favorable a estrechar los lazos entre Taipéi y Pekín, en una suerte de «referéndum revocatorio» celebrado el sábado pasado.

La votación, sin precedentes en la historia democrática de la isla, fue impulsada por organizaciones civiles que ven con recelo algunas de las principales medidas aprobadas por la oposición, como la ampliación de las facultades de supervisión parlamentaria, los recortes al presupuesto estatal o los intentos de obstruir el funcionamiento del Tribunal Constitucional.

Tras el fracaso del referéndum, el Parlamento de 113 escaños sigue controlado por una mayoría de 52 legisladores del KMT, 8 del Partido Popular de Taiwán (PPT) y 2 independientes afines al KMT, un bloque que ha impulsado numerosas iniciativas contrarias a los intereses del Ejecutivo, como recortes al gasto en Defensa.

«Quiero expresar mis más sinceras disculpas a todos los grupos cívicos y simpatizantes que dieron todo su esfuerzo (en las campañas de destitución)», aseveró el miércoles Lai, cuyo Gobierno deberá enfrentarse a un Parlamento más envalentonado y a una coyuntura internacional más incierta en los próximos meses.

Javier Castro Bugarín