Lugo, 22 sep (EFE).- El Ayuntamiento de Monforte de Lemos ha manifestado en una declaración institucional su “más enérgica condena” a los “gravísimos acontecimientos” de la madrugada del sábado, cuando unos desconocidos lanzaron cócteles molotov contra el edificio en el que estará el primer centro gallego de acogida a menores migrantes, promovido por la Xunta.
Un ataque ante el que la «respuesta debe ser clara y rotunda: no hay lugar para el odio en Monforte de Lemos», asegura en esa declaración, aprobada de forma unánime este lunes por la junta de portavoces.
“Este ataque constituye no solo un atentado contra la seguridad y la convivencia en nuestro municipio, sino también un acto que responde a motivaciones de odio, racismo y xenofobia, totalmente incompatibles con los valores democráticos que defendemos como sociedad”, subraya el Ayuntamiento.
“Monforte de Lemos siempre fue, y seguirá siendo, una ciudad abierta, solidaria y comprometida con los derechos humanos. La violencia, el miedo y la intolerancia jamás podrán tener cabida en nuestro municipio ni en ninguna sociedad que aspire a la justicia y a la paz”, añade.
También expresa el apoyo y solidaridad del Ayuntamiento a “las entidades y profesionales que trabajan cada día para garantizar la protección de los menores extranjeros, su integración y bienestar”.
Del mismo modo, subraya su confianza plena “en la labor de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y de la Justicia para esclarecer los hechos y depurar las responsabilidades que correspondan”.
El Ayuntamiento de Monforte de Lemos hace un llamamiento a la ciudadanía para “mantener la unidad frente a cualquier manifestación de odio” y reafirma su “compromiso con la convivencia pacífica, la igualdad, la diversidad y el respeto a la dignidad de todas las personas”.
“Una agresión basada en el racismo o la xenofobia no es solo un ataque contra unas víctimas concretas, es un ataque contra toda nuestra sociedad. Y nuestra respuesta debe ser clara y rotunda: no hay lugar para el odio en Monforte de Lemos”, concluye.
La junta de portavoces fue convocada por el alcalde, José Tomé, tras el ataque con cócteles molotov que se produjo la madrugada del pasado sábado, 20 de septiembre, contra el edificio de Prodeme, elegido por la Xunta de Galicia para crear un centro de acogida para menores migrantes no acompañados con 80 plazas.
