Barcelona/Girona, 29 mar (EFE).- Hacerse fuerte en Montjuïc es la premisa que necesita el Barcelona, líder de LaLiga, para continuar al frente del campeonato, ya que cuatro de los próximos cinco partidos, el primero este domingo ante el Girona (16:15 CET), los disputará en casa.
Será ante un rival con el que tiene cuentas pendientes, por el recuerdo del doloroso 2-4 de la pasada temporada que fue un primer aviso al Barça de Xavi por lo que le podía esperar.
Aunque las circunstancias son diferentes. En el Barça ya no está Xavi Hernández, sino Hansi Flick, y el rendimiento del equipo es mucho más regular y aspira a todos los títulos en juego, mientras que enfrente el Girona de Míchel Sánchez ya no es el equipo revelación que jugó la Champions y viaja por la parte media baja de la clasificación.
A los barcelonistas el 3-0 ante el Osasuna les dejó la constatación de que están en un buen momento de juego, pero también de la fragilidad que puede aparecer en cada momento, con la lesión de Dani Olmo, que sufrió una lesión miofascial en el aductor de la pierna derecha y estará tres semanas de baja, justo cuando todo se decide.
La ausencia de Olmo permitirá a Flick sacar un nuevo recurso de su cartera de tácticas, en un esquema en el que la posición de mediapunta es determinante, pero la sustitución del centrocampista de Terrassa no será lo único que tendrá que decidir.
Después de que fue reservado ante Osasuna, tras una lesión con la selección, todo apunta a que Pau Cubarsí volverá al eje defensivo para hacer pareja en la zona central con Íñigo Martínez, eso si no le da minutos a Ronald Araujo, porque el calendario del Barça es infernal y el miércoles tiene otro bolo, esta vez en el Metropolitano, donde le espera el Atlético de Madrid y la vuelta de la semifinales coperas.
En los laterales, el gran rendimiento de Kounde y Alejandro Balde no adivina cambios; como tampoco en el dúo creativo con Frenkie de Jong y Pedri, seguramente el jugador más en forma del equipo,
La duda estriba en la mediapunta. Podría poner en juego a Gavi, que ofrece mucha presión en la zona; a Fermín, que es más verticalque el anterior; incluso a Pablo Torre, que tuvo unos minutos ante Osasuna que fueron muy bien aprovechados.
Pero aquí no acaban las opciones. Si Flick decide aprovechar la inercia de Ferran o el regreso de Raphinha, el alemán podría situar en la mediapunta a alguno de los dos; algo que ya ha hecho en el pasado con el brasileño, pero no tanto con Ferran. En la parte de arriba, están seguros Lamine Yamal y Lewandowski.
No llega el Girona en su mejor momento. Firma un pobre balance de una victoria en los últimos 11 partidos y tres triunfos en los últimos 19 encuentros y Europa, objetivo y sueño, se ha ido alejando, aunque todavía no es imposible si se reacciona pronto: el Mallorca y el Celta, séptimo y octavo, están a seis y cinco puntos de distancia.
La realidad dice que ya son seis partidos sin ganar, aunque en los últimos tres partidos el equipo gerundense al menos ha podido arañar un punto después de ir perdiendo: ante el Celta de Vigo (2-2), con gol de Yangel Herrera, y ante el Espanyol (1-1) y el Valencia (1-1), con goles de Cristhian Stuani saliendo desde el banquillo.
Los números dictan que aún se puede aspirar a repetir la clasificación europea, pero Míchel Sánchez admite en las ruedas de prensa que las sensaciones no son para luchar por Europa porque el juego del equipo continúa demasiado lejos del esperado y la afición incluso teme por los fantasmas del descenso de 2019. Aunque el Girona tiene un margen de siete puntos a falta de 30 por jugar.
La visita del curso pasado al Estadi Lluís Companys (2-4) sirvió para que el Girona entrara en “una nueva dimensión”, en palabras del entrenador madrileño, y se situara líder de Primera, pero el partido de este domingo se presenta como un reto muy complicado para un equipo que sigue sufriendo para generar peligro.
Además el Girona afronta el derbi en cuadro en el centro del campo porque Donny van de Beek e Iván Martín son baja por sanción y por lesión respectivamente y porque tiene la duda de Oriol Romeu: el club se plantea pagar la penalización para librarle de la cláusula del miedo como cedido desde el Barça, pero este viernes no entrenó por un asunto personal.
También son baja Bryan Gil, que habría dicho adiós a la temporada por un esguince de rodilla, y los delanteros Bojan Miovski y Abel Ruiz, por lo que Arnaut Danjuma podría volver a la punta de ataque.
— Alineaciones probables:
Barcelona: Szczesny; Kounde, Cubarsí, Íñigo Martínez, Balde; De Jong, Pedri; Gavi o Fermín; Lamine Yamal, Lewandowski y Raphinha.
Girona: Gazzaniga; Arnau, David López, Krejci, Blind, Miguel; Herrera, Arthur; Tsygankov, Asprilla; y Danjuma.
Árbitro: Juan Pulido Santana (Comité las Palmas)
Estadio: Olímpic Lluís Companys.
Hora: 16:15 CET
———————
Posiciones: Barcelona (63 puntos, 1º); Girona (34 puntos, 13º).
El dato: El Barcelona continua invicto todo 2025, con 15 victorias y tres empates.
La clave: La duda en la recuperación de los barcelonistas tras haber disputado el pasado jueves un partido atrasado ante Osasuna
Las frases:
Flick: “Quedan muchos partidos. Nuestro objetivo es ganarlos todos”
Míchel: “El Barça tiene tres o cuatro de los mejores jugadores del mundo ahora mismo”
Bajas: Ter Stegen, Marc Bernal, Christensen, Marc Casadó, Dani Olmo (lesión) (Barcelona). Bryan Gil, Iván Martín, Abel Ruiz y Jhon Solís (lesión) y Donny van de Beek (sanción).
Dudas: Oriol Romeu por la cláusula del ‘miedo’.
Apercibidos: Gavi (Barcelona); Bryan Gil, Ladislav Krejci y Portu (Girona).