Redacción Ciencia, 16 sep (EFE).- En el próximo siglo se prevé que la temperatura del aire aumente entre 1 y 6º C en las regiones tropicales y que los suelos de esas zonas se calienten a un ritmo similar, lo que puede tener efectos dramáticos en el sistema terrestre de carbono y en el clima.
Según un nuevo estudio, este calentamiento podría alterar las tasas de respiración del suelo -el proceso por el cual el dióxido de carbono se libera del suelo a la atmósfera- y acelerar la pérdida de CO2 almacenado en los suelos de los bosques tropicales a unos niveles «considerablemente mayores» de lo previsto u observado hasta ahora.
Los detalles del estudio, liderado por el US Forest Service, un organismo del International Institute of Tropical Forestry, en Río Piedras (Puerto Rico), se han publicado este martes en la revista Nature Communications.
Un experimento in situ
La respiración del suelo juega un papel esencial en el ciclo global del carbono, y cualquier cambio por pequeño que sea puede afectar al clima de todo el planeta.
A su vez, los bosques tropicales desempeñan un papel importante, ya que intercambian más CO2 con la atmósfera que cualquier otra región terrestre.
Sin embargo, a medida que se espera que las temperaturas aumenten en los próximos años, aún no se comprende bien cómo afectará la respiración del suelo, especialmente en las regiones tropicales.
Para tratar de cuantificarlo, un equipo de científicos de Estados Unidos liderados por Tana Wood, del US Forest Service, un organismo del International Institute of Tropical Forestry, en Río Piedras (Puerto Rico), llevaron a cabo un experimento in situ para rastrear cómo se mueve el carbono a través de los suelos de los bosques tropicales en Puerto Rico.
Los autores calentaron artificialmente tres parcelas de 12 metros cuadrados de plantas de sotobosque y suelo de distintas alturas (ladera inferior, media y superior) a 4 °C por encima de las temperaturas ambientales.
Después, rastrearon las tasas de respiración del suelo en estas parcelas frente a muestras de control en posiciones similares a intervalos de media hora durante el transcurso de un año. En total, recopilaron 57.450 mediciones.
Las tasas de respiración del suelo se encontraron entre 42 y 204% más altas en parcelas calentadas en comparación con parcelas de control, algunas de las tasas de respiración del suelo más altas reportadas para cualquier ecosistema terrestre.
El carbono adicional liberado por las parcelas calentadas por año osciló entre 6,5 y 81,7 mg por hectárea, variando según la posición de la pendiente, con la parcela de la pendiente superior liberando la mayor cantidad de carbono.
El equipo cree que esta situación podría deberse a cambios en la función de las comunidades microbianas en el suelo calentado, como cambios en su capacidad para metabolizar el carbono o cambios en la composición de la comunidad microbiana, si bien creen que es necesario hacer más estudios para comprender los mecanismos que impulsan estos procesos que afectarán al clima a largo plazo.
Conclusiones del estudio
Las altas tasas de respiración del suelo reportadas en este estudio demuestran el potencial de grandes pérdidas de carbono de los ecosistemas de bosques tropicales en un mundo más cálido.
Los resultados del experimento demuestran que el calentamiento climático podría aumentar las tasas de respiración del suelo en los bosques tropicales y provocar mayores pérdidas de carbono en los suelos tropicales de lo que se anticipaba anteriormente, con consecuencias para las proyecciones climáticas globales.
Una mejor comprensión de los mecanismos que impulsan estos procesos es crucial para evaluar el impacto del cambio climático a largo plazo, concluyen los autores. EFE
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